Un viaje por la provincia de Málaga puede ser muy variado. Altas montañas se intercalan con suaves lomas. No faltan kilómetros de playa y las grandes ciudades se van mezclando en el mapa con pueblos pequeños que dan bien en una postal. Tan diverso como es el paisaje de la provincia, también lo ha sido el comportamiento electoral de los ciudadanos. En Alameda, por ejemplo, Vox apenas ha logrado poner un pie en la tierra y no pasa del 3% de los votos. En Alhaurín el Grande, por otra parte, late el corazón del PP. Con un 32%, representa la mejor marca de los populares en la provincia. Y, quién lo pudiera creer, existen todavía bastiones del PSOE. En Serrato, un pueblo en la Serranía De Ronda de nuevo cuño, que obligó junto a Montecorto a modificar el eslogan de «Somos 101» a «Somos 103», Susana Díaz obtuvo un 70% de los votos escrutados. Una cosa está clara: los resultados electorales han dejado sus huellas y arañazos. Tanto en la cara de los políticos como en sus biografías. Estos son algunos de los lugares a destacar dentro del mapa político de la provincia de Málaga.

Alhaurín el Grande siempre ha sido un municipio idílico para los intereses del PP. Bajo el ordeno y mando de Juan Martín Serón, empezaron a llover las mayorías absolutas. Juanma Moreno, después de su paso por Madrid, alterna estancia entre Málaga y Sevilla. De puertas para fuera, podría ser considerado como el típico habitante de la gran ciudad. No es que eso sea un impedimento para triunfar en Alhaurín el Grande como candidato popular, pero tampoco ha restado que a Moreno se le considera como a alguien del terreno. Parte de su familia reside en el municipio vecino de Alhaurín de la Torre. Ahí queda en el cuaderno de campaña su actuación musical. Algunas risas fueron mayúsculas. Ya no resuenan tanto. ¿Cómo está la situación en Alhaurín el Grande ahora mismo? La actual alcaldesa, Antonia Ledesma, representa a ese hijo que vuelve a casa después de haber protagonizado una fuga. Con la expulsión de Martín Serrón del PP por una condena en firme en el caso Troya, Ledesma optó por seguir a su mentor y padre político. Ahora ha vuelto y será la candidata del PP en las elecciones municipales de mayo. Preguntada por la receta para estos buenos resultados, Ledesma ofrece dos ingredientes principales: la gestión en el Ayuntamiento y una campaña como gusta en los pueblos, es decir en clave de cercanía. «Nosotros estamos muy contentos con el respaldo que ha obtenido el PP aquí. Desde luego, marca una tendencia para las municipales y nos indican que vamos por el buen camino. Yo, como presidenta del PP de Alhaurín el Grande, he redactado una carta para pedir el voto por Juanma y la hemos repartido casa por casa», relata. Que la cosa en Alhaurín va de derechas, lo confirma también la fuerte irrupción de Vox con un 15% de los votos obtenidos. Es donde mejor resultados ha obtenido el partido de extrema derecha. A Ledesma esto no le preocupa excesivamente cara las municipales porque cree que es una especie de voto prestado. «A Vox le ha votado mucha gente que es cercana a nosotros», precisa luego que cuenta con esos votos para mayo», se muestra confiada. Si se prosigue el viaje, a unos 50 kilómetros por la Costa, se llega a Benahavís. Es el municipio con mayor renta per capita de la provincia. Priman las urbanizaciones privadas, las grandes casas y los coches de buena talla. En este entorno, Vox ha obtenido su mayor respaldo. Con un 19% de los votos, es el principal bastión del partido de extrema derecha en la provincia. ¿Qué motiva el voto en un municipio que esquiva al fantasma de la pobreza y que cuenta con una amplia red de servicios? La apelación a la unidad de España se erige fundamental.

Que los argumentos para votar a Vox son variados lo refleja la situación en Málaga capital. En un distrito como Miraflores - Arroyo de los Ángeles, se ha dado el caso de una mesa en la que Vox ha sido la formación más votada. Un barrio obrero, con bastante inmigración, y castigado por el paro. Muchos no saben lo que es el Ibex 35 pero sí saben que en los últimos años ha aumentado los inmigrantes que se reparten entre el mar de bloques. Un 26% del voto en una mesa del distrito siete ha ido a parar a Vox. Eso, en un barrio que ha votado en su conjunto al PSOE, da para sacar lecciones cara al futuro y buscar causas para la eclosión del voto de extrema derecha. El argumento antiinmigración cala entre las clases medias bajas. De Málaga a la Serranía de Ronda. Hay que irse a Serrato para dar con lo que es ahora mismo el paraíso del PSOE en la provincia. Como se ha mencionado al principio, un 70% de los votantes han optado aquí por Susana Díaz. Para el alcalde, Francisco López, no es nada nuevo. «Viene sucediendo desde que entramos en democracia. Antes, éramos una mesa más de Ronda. Ahora se visualiza más el voto al ser un municipio propio». Sobre el auge de Vox dicta sentencia: «Los franquistas hace dos días que se han ido».