El proyectado hotel de cuatro estrellas que se ubicará en los números 19 y 21 de la calle Madre de Dios avanza poco a poco en su tramitación. La Junta de Gobierno Local dio ayer el visto bueno inicial al estudio de detalle de ambas parcelas. El establecimiento turístico, por cierto, está promovido por la empresa Atarloqui SL.

El proyecto se reactiva para mejorar una calle que, en palabras del teniente de alcalde de Economía y Hacienda, Carlos Conde, «atraviesa una situación complicada desde hace tiempo porque había, en el año 2003, muchos edificios y parcelas en ruinas». Por tanto, para el portavoz del equipo de gobierno es una buena noticia que «la iniciativa privada vea en esta vía una oportunidad de desarrollo».

El espacio está conformado por dos parcelas que suman una superficie de 564,33 metros cuadrados, y se establece en el estudio una ordenación de volúmenes que permita edificar ambos suelos teniendo en consideración la tipología específica así como la trama parcelaria histórica.

La nueva edificación, de uso hotelero, será de cuatro estrellas y tendrá 50 habitaciones. Tendrá tres plantas más una baja, sobre todo para los aparcamientos.

Edificios singulares

Por otro lado, se dio ayer luz verde al proyecto de modificación de elementos pormenorizada del PGOU. Partiendo de la necesidad de establecer una norma que posibilite la implantación de edificios singulares en parcelas no edificadas, calificadas como equipamientos públicos, en la zona de la ciudad histórica, la innovación propuesta contempla añadir un nuevo artículo (de equipamientos singulares) con la finalidad de posibilitar la construcción de edificios que ejerzan su función de centro de actividad y dinamizadores del centro. De hecho, con ocasión del concurso arquitectónico de los antiguos cines Astoria-Victoria, y su desarrollo posterior, se ha visto la necesidad de establecer una normativa que tenga en cuenta la posibilidad de edificar un inmueble singular en el Centro. En otros casos, como en otros, se pueden plantear de la misma proyección y singularidad, es preciso un edificio complejo arquitectónicamente y de usos. Como se recoge en la propuesta técnica, un edificio singular y complejo lo es si es capaz de dialogar con las tipologías del entorno de manera no mimética y convertirse en un hito de la ciudad sin ser extraño al lugar. Si es capaz de aglutinar usos con el atractivo suficiente para atraer al máximo público posible para ejercer su función de equipamiento público con la máxima difusión y eficacia, informó Conde.