En el comedor de la calle Fuentecilla ultiman detalles para comenzar a primera hora de esta tarde el tradicional reparto de menús solidarios que hace la asociación Los Ángeles malagueños de la Noche, un reparto que acompaña con una gran entrega de 50.000 kilos de alimentos para que los que tienen más dificultades pasen de una manera más desahogada las fiestas.

De los habituales 3.000 menús solidarios que han repartido en años anteriores, el presidente de Los Ángeles de la Noche, Antonio Meléndez, aseguró hace unas semanas que este año requería unos 2.500 gracias a los contratos temporales que habían conseguido algunos usuarios del comedor y que evitaba que tuvieran que ir a por la cena de Nochebuena. Un menú que comprende medio pollo, guarnición de tortilla de patata, pan y algún dulce navideño y que cualquier ciudadano ha podido adquirir en alguno de los 22 asadores que han participado este año por tan solo seis euros. Aunque la solidaridad también es bienvenida por parte de las empresas y por segundo año consecutivo el hospital Vithas Costa del Sol ha entregado un cheque solidario que ha correspondido a 450 menús. La cooperativa andaluza farmacéutica Cofarán, por su parte, ha entregado 50, según informó Meléndez.

Desde ayer trabajan en el comedor para que todo esté listo hoy a las 16.00 horas cuando quieren comenzar con el reparto. Una entrega a la que se suman también la habitual entrega de alimentos para ayudar a pasar las fiestas a las familias con más dificultades. Hasta 50.000 kilos de productos no perecederos que se colocan en una gran fila de mesas por la que van pasando por orden aquellos que se acercan al comedor y a los que los voluntarios van llenando sus bolsas, cestas e incluso carritos. Una iniciativa a la que años anteriores se ha unido el humorista y actor Dani Rovira pero que este año el presidente de la asociación cree que no podrá participar. «Está muy liado con las películas. No estará con nosotros físicamente pero sí con el corazón», indicó Menéndez.

Mientras tanto, los voluntarios recogen hasta el último minuto todos los productos que empresas y personas de manera individual quieren entregar para dar en las próximas horas. Unos 50.000 kilos de alimentos que, en caso de que se supere la cifra de recolecta,Meléndez asegura que se destinará a ayudar a asociaciones que, al igual que ellos, no cuentan con ninguna subvención ni ayuda institucional.

El año pasado unas 800 personas se acercaron a la calle Fuentecilla para hacerse con su menú y todos los productos que pudieron, una cola que empieza a formarse al inicio del día y en la que ya aguardan decenas de personas.