El mercado inmobiliario español continúa marcando un ritmo de aceleración en este 2018 y Málaga, como es habitual, se coloca de nuevo entre las zonas de mayor actividad. Según los últimos datos publicados por el Ministerio de Fomento, en los tres primeros trimestres del año se han vendido en Málaga un total de 25.945 vivendas, con una subida del 11,6% en relación al mismo periodo del año anterior. La cifra arroja una media de 96 operaciones al día y es la más alta desde que en 2008 arrancó la crisis. En 2007, el último año del boom económico, el volumen superaba hasta septiembre las 30.722 compraventas.

La gran pujanza que exhibe el mercado malagueño sitúa a la provincia como la cuarta de España con más ventas en este 2018 tras Madrid (62.205), Barcelona (44.708) y Alicante (33.199) y justo por delante de Valencia (25.523). Si se mantiene el mismo ritmo de ventas en este cuarto trimestre que ahora se cierra (habrá que ver, por ejemplo, si el mercado se resiente por la polémica que generó el Tribunal Supremo en torno al pago del impuesto de actos jurídicos documentados en las hipotecas), Málaga acabaría 2018 con más de 35.500 compraventas, relativamente cerca ya del nivel de 2007, cuando se vendieron algo más de 40.000 casas.

Por municipios, Málaga capital y Marbella aparecen otra vez como los que más tiran de las ventas. Según Fomento, en Málaga se vendieron 5.916 viviendas, con un incremento del 14,7% sobre las cifras del anterior ejercicio. En Marbella la cifra fue de 3.174 (un 1,1% más). En Mijas se vendieron 2.298 (con una subida del 12,8%), en Benalmádena 1.851 (+15,8%), en Torremolinos 1.492 (+14,9%) y en Vélez-Málaga 1.294 (+2,8,2%), por citar los enclaves con más operaciones. Sólo se aprecian leves bajadas en Estepona (1.930, cae un 6%) y en Fuengirola (1.293, un 4,8% por debajo del año anterior).

El nuevo repunte del mercado mantiene las características de los últimos años. Por un lado, las viviendas de segunda mano son las que acaparan el mercado, concentrando el 90,6% de las operaciones. Y es que la oferta de producto nuevo sigue siendo escasa, a espera de que se vayan incorporando promociones ya en construcción o en proyecto. Eso sí, la venta de vivienda nueva (1.960 operaciones en 2017) por lo menos va repuntando, con un crecimiento del 70% sobre el año precedente.

El segundo factor es la importancia del comprador extranjero. Según los datos de Fomento, en los tres primeros trimestres se han registrado 8.219 operaciones a cargo de foráneos en Málaga (tanto residentes como no residentes), lo que supone el 25% del total de compraventas. La provincia es una de las más activas en este segmento, aunque el porcentaje en años anteriores superaba el 30%, lo que revela que el comprador nacional está volviendo ya al mercado.