Las vacaciones de Navidad están llegando a su fin, aunque este año con el paso del día de fiesta al 7 de enero por caer el 6 en domingo, aún se pueden apurar un poco más. Este hecho ha favorecido, en especial, a los hosteleros y hoteleros de Málaga, que esperan en este puente de Reyes una ocupación de un 90 por ciento en la capital y alrededor de un 80 por ciento en la provincia.

Con respecto a fin de año, los hoteles han estado en un 85 por ciento en el conjunto provincial, es decir, que se espera una «ligera bajada» en estos últimos días. El motivo para el presidente de la Asociación de Hoteleros de la Costa del Sol, Luis Callejón, es claro: son fiestas más familiares que incitan a quedarse en casa, sobre todo, por los más pequeños. Es por ello que el mercado nacional «no despunta». Sin embargo, «ese día de más nos da juego para que se puedan mover los viajeros». Además, otros mercados como el británico, alemán o francés «aunque no tienen estas fiestas aprovechan el último tirón de las vacaciones y hacen que se incrementan las ocupaciones», asegura Callejón.

Asimismo, la temperatura que se espera este fin de semana también es otro punto a favor, pues «nos pueden empujar las reservas de última hora». Por ello, teniendo en cuenta que se produce esa bajada en la ocupación debido a la naturaleza propia del último fin de semana de la Navidad, Callejón valora que «son unos datos muy buenos»

Por su parte, para los hosteleros que haya un día festivo ha repercutido en que sus previsiones para el fin de semana sean, al igual que durante todas las Navidades, «muy buenas». Este año, según el presidente de Mahos, Javier Frutos, «hemos tenido una Navidad positiva» en la misma línea que el año pasado, aunque el día 7 hace que «seguramente haya más movimiento». Algo muy bien acogido en Mahos debido al «bajón» que esperan a partir del día 8. Un hecho que se prolongará, al menos, hasta marzo.

En general, tanto las fiestas navideñas como el 2018 han dejado buenas cifras para los hoteleros, que «aunque no ha sido un año excelente como 2017, no ha dejado de ser un buen año». La media ha ido un punto o un punto y medio por debajo con respecto al año anterior, detalla el presidente de la patronal hotelera, lo que hace que se «estabilicen los números». El objetivo ahora, relata, es conseguir una ocupación media durante todo el año que ronde el 60 o 65 por ciento de ocupación. Eso «sería un lujo para la Costa del Sol y tenemos material suficiente para poder seducir en Navidad, primavera, verano, otoño e invierno».

Los hosteleros también creen que el 2018 ha sido un año positivo para el sector, a pesar de lo «flojo» que fue el primer trimestre. «La tónica de consolidación de visitantes» junto con que «Málaga está de moda» ha generado cifras con las que están «contentos».