El histórico dirigente del PSOE, Eduardo Martín Toval, ha fallecido esta tarde a los 76 años a causa de un infarto en la Cala del Moral. Según han confirmado fuentes del propio PSOE de Málaga, ha caído fulminado después de regresar de la manifestación por los derechos de la mujer que se ha celebrado esta tarde en la plaza de la Constitución.
Según añaden las mismas fuentes, el desfallecimiento ha tenido lugar en el paseo marítimo de la Cala del Moral, donde residía Martín Toval desde que se jubiló de su labor como inspector de trabajo. Martín Toval fue mano derecha de Alfonso Guerra y compitió por la alcaldía de Málaga con Celia Villalobos.
La última entrevista que este veterano político realizó se publicó en este periódico el pasado domingo 23 de diciembre, hace apenas tres semanas y días después de que hubiera coincidido en un acto en la capital con Alfonso Guerra. «Los votos de los ciudadanos son los que valen, gusten o no», afirmó en las páginas de La Opinión, en las que contó que seguía afiliado al PSOE en Rincón de la Victoria. «Yo sigo afiliado por coherencia. Seguramente, esa coherencia tiene mucho de coherencia nostálgica. Y por convicciones. Por convicciones sobre lo que era mi partido y mi militancia a favor de los obreros. En mis tiempos, todavía había obreros y sindicatos de clase en condiciones», explicó entonces.
Martín Toval, nacido en Málaga en 1942, era licenciado en Derecho y empezó su carrera política en el PSC, tras trasladarse a trabajar a Cataluña. De hecho, fue diputado por Barcelona en el Congreso de los Diputados y en el Parlamento catalán. Su carrera política estuvo muy vinculada a la etapa de Felipe González y Alfonso Guerra, siendo portavoz del grupo socialista en el Congreso entre 1985 y 1993.
En 1995 regresó a Málaga como candidato a la alcaldía de la capital malagueña, en unas elecciones en las que se enfrentó a Celia Villalobos (PP) y Antonio Romero (IU). La suma de IU y PSOE daba mayoría pero la falta de acuerdo hizo que fuera Villalobos terminara siendo alcaldesa. Martín Toval estuvo esa legislatura como portavoz municipal y, tras perder las primarias frente a Francisco Oliva, se reincorporó a su puesto en la Inspección y trabajó para la embajada de España en Marruecos.
