El número de embargos de cuentas bancarias que el Ayuntamiento de Málaga ejecuta por el impago de tasas, multas o tributos municipales se ha disparado en los últimos años; más aún ha crecido el dinero recaudado por estos embargos. respecto al anterior, a tenor de los datos facilitados por la empresa de gestión tributaria (Gestrisam) respondiendo a una pegunta realizada por el grupo municipal IU Málaga para la Gente (IUMpG).

Los datos de los últimos cuatro años señalan que el número de diligencias de embargo ha crecido un 17,8 por ciento. En 2015 el número de embargos fue de 49.163; el número ha ido subiendo y cuatro años después, en 2018, las diligencias con embargo fueron 57.967.

No sólo se ha disparado el número de embargos ejecutados sino también el importe retenido por este procedimiento. El repunte en este caso es de un 22 por ciento. Así el importe de lo embargado en 2015 fue de 5.569.205 euros; aunque en 2016 y 2017 bajó ligeramente, en 2018 lo recaudado por este concepto volvió a subir y fue de 6.829.694 euros.

El embargo de cuentas corrientes es el último paso que realiza Gestrisam para conseguir cobrar a los ciudadanos que se niegan a hacer efectivo el abono de multas o impuestos por la vía voluntaria o por la ejecutiva. El pasado año el Ayuntamiento logó recaudar el 89,25 por ciento de todos los tributos municipales e ingresos alcanzando una recaudación de 552,5 millones de euros.

Con todo, el Ayuntamiento señala en su respuesta que este método de recaudación por embargo se sitúa en torno al 3% del total de los recibos puestos al cobro y en un 1 por ciento aproximadamente si la comparación es sobre el total recaudado.

Aun así la preocupación de los responsables municipales y de Gestrisam se mantiene pues, pese a las medidas de ayudas puestas a disposición de los contribuyentes, el número de ciudadanos y de empresas que son embargados sigue creciendo en los últimos años, cuando el objetivo es rebajar esta bolsa de deudores crónicos.

Así entre las facilidades de pago, Gestrisam ha sido pionero en la implantación de la figura de la insolvencia provisional, con la creación de un registro en el que se inscriben aquellas familias en riesgo de exclusión social cuyos ingresos no alcanzan el Salario Mínimo Interprofesional y con el que se frena de inmediato cualquier embargo de cuenta hasta que se recuperen económicamente. Actualmente, según los datos del Ayuntamiento hay 364 familias inscritas en el registro y el montante que deben asciende a 550.000 euros.

La otra medida que viene desarrollando Gestrisam en los últimos años es el fraccionamiento del pago de la deuda a los contribuyentes que lo soliciten.

Esta modalidad viene siendo muy demandada y en los últimos años la media es de unos 10.000 contribuyente que la solicita. En 2017, se concedieron 9.708 fraccionamientos de pago que suman 15,8 millones de euros. Las cifras son muy similares sobre los años 2015 y 2016. El periodo medio de aplazamiento es de algo mas de un año (13 meses), pero hay casos en los que se alarga el fraccionamiento hasta los 16 meses o mas.

Gestrisam no solo embarga cuentas corrientes, también se centra en el embargo de viviendas por el impago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Igualmente, realiza esta actividad en relación a vehículos, establecimientos comerciales y títulos de crédito, para lo que realiza una labor inspectora permanente.