En el PP andaluz han dejado de ser melindrosos. Los últimos en experimentarlo de forma dolorosa han sido los abanderados de Pablo Casado en Málaga. Están viendo como los nombramientos para los cargos que componen el organigrama de la Junta de Andalucía les están pasando de lejos. «Ni los ven venir», atestigua una fuente del PP, pues no se les está teniendo en cuenta para ningún objetivo concreto. Después de las primarias, parecía que venían bien dadas para el casadismo en la provincia. Pero el triunfo de Juanma Moreno fue también el triunfo de Elías Bendodo y no ha hecho más que fortalecer los viejos equilibrios tanto dentro del PP andaluz como en el PP de Málaga. Todas las miradas se lanzan ahora sobre el flamante consejero de Presidencia cuando toca dilucidar los nombres de las personas que ocuparán los cargos que quedan por designar en el organigrama de la Junta de Andalucía. Dicen de él en Málaga que es la biblia de los nombramientos y que él es el encargado de tallar las tablas con más enjundia del BOJA.

Y no son pocos los nombramientos que quedan pendientes. La Junta es una institución de tales proporciones que daría para colocar a varios equipos de fútbol. Secretarios generales, delegados, jefes de gabinete, consejeros delegados y gerentes de empresas públicas vinculadas. La Junta se parece a un mercado de abastos de cargos que ofrecen buena estabilidad salarial. A Bendodo se le ve feliz en su nuevo cargo. En su cuenta de Instagram sube fotos de la impresionante fachada del Parlamento andaluz y se muestra practicando footing por nuevas rutas, ya cercanas al río Guadalquivir. Bendodo atesora una buena forma y marcas bastante respetables en las medias y largas distancias. En su muñeca luce en muchas ocasiones un buen Garmin, que es la mejor herramienta para ilustrar los avances personales de uno. Sus zancadas no faltan en la Maratón de Málaga.

Correr sirve para despejar la mente y ayuda a ver el cuadro completo antes de la toma de decisiones complejas. Clarividencia le viene bien a Bendodo ya que quedan puestos por ocupar en las siguientes semanas. El nombramiento de Antonio Sanz como su viceconsejero provocó cierta convulsión entre algunos miembros del partido en Málaga. «Me da a mí que poco gente de aquí va a acabar en Sevilla», resume una persona con buena conexión en el PP de Málaga. Pero en esta ciudad también se escudriñan puestos apetecibles. El que más, la Presidencia del Puerto de Málaga, ocupada, le queda poco, por Paulino Plata. Tiene fama de ser un caramelo para premiar a los políticos más veteranos. De oeste a este y de norte a sur hay aspirantes en esta ciudad que les tiembla la mano solo de pensarlo. Joaquín Ramírez cumple el perfil. El ahora senador fue destronado en su momento por el propio Bendodo y ahora podría tener con él el gesto definitivo de la reconciliación. En contra de Ramírez juega que en las primarias del partido siempre se posicionó en alternativas opuestas a la defendida por la dirección provincial. Él se decantó por María Dolores de Cospedal.

Todos los días se lanzan nombres, eso es verdad. Andalucía se despierta leyendo nuevos nombres y a Ramírez le ha salido un duro competidor, como confirman las fuentes consultadas por este periódico: Miguel Briones. El exsubdelegado del Gobierno en Málaga con Mariano Rajoy se ha caído para el puesto de delegado de la Junta en Málaga. Ese cargo lo lleva escrito en grandes letras de molde Patricia Navarro. Pero Bendodo querría contar con él y le contempla como presidente del Puerto de Málaga. Las mismas fuentes también colocan a Arturo Bernal, compartiendo responsabilidades con el propio Briones. A Jacobo Florido le acompañan rumores que le ponen al frente de Extenda, la empresa que tiene la Junta para promocionar a los empresarios andaluces en el exterior. Él niega que le hayan llamado y atribuye las especulaciones a las posibles similitudes de Extenda con sus responsabilidades en Sabor a Málaga. En los escalones inferiores, está cobrando fuerza el nombre de José Luis Pastrana, representante del Colegio de Médicos como delegado de Sanidad.

Quien ya ha hecho las maletas con dirección a Sevilla es Fernando Leguina. El jefe de protocolo del Ayuntamiento de Málaga será el nuevo director de Protocolo de la Junta de Andalucía. Tuvo sus dudas iniciales, pero acabó aceptando el ofrecimiento. También se va Manuel Muñoz, todavía gerente de Turismo Andaluz, y futuro secretario general de Turismo.