Soslayar la denuncia como método para resolver problemas de los ciudadanos y centrarse en analizarlos para erradicarlos de raíz, tal vez con una solución que no sea policial. En eso consiste el nuevo Plan Director de la Policía Local de Málaga, presentado esta mañana por el concejal del área, Mario Cortés, un documento que sólo tienen Madrid y Barcelona y que supone un cambio en "el paradigma de funcionamiento del cuerpo".

Cortés ha puesto el siguiente ejemplo: si una calle de una barriada tiene un problema con la doble fila y los ciudadanos llaman reiteradamente para denunciarlo, hay dos soluciones, mandar un coche de la Policía Local para que sancione continuamente a los conductores o un vehículo con cámaras, o enviar a un policía que esté siempre en esa vía y disuada a quienes aparcan en doble fila sin sancionar. Eso es lo que se busca con este plan director, porque muchas veces los problemas pueden resolverse, como ha dicho Cortés, con otras soluciones que pueden ser la instalación de cámaras, un cambio de regulación o incluso urbanísticas.

"Es una hoja de ruta enfocada a la resolución de problemas del día a día de la ciudad, en el que se valora el trabajo de calle y se hace hincapié en la cercanía con el ciudadano", ha dicho Cortés, quien añade que "el malagueño quiere ver en sus calles a la policía". Los tres pilares del plan son la mejora continua, la innovación y el enfoque hacia el ciudadano y la resolución de los problemas que afecten a los vecinos en materia de seguridad y convivencia.

Para ponerlo en marcha se han analizado la evolución de la población en los últimos años, los datos sociodemográficos, la población inmigrante, el desempleo, el sector turístico y las actividades culturales. El turismo es importante, porque implica población flotante así como nuevos usos de espacios públicos y hábitos de ocio, que a su vez son nuevos retos para la seguridad. También se ha analizado la evolución de la plantilla policial en los próximos años, a la que pronto se incorporarán 90 nuevos agentes.

Cada uno de los grandes objetivos se despliega hasta en 67 acciones, de forma que se vigilará el cumplimiento de las ordenanzas y la gestión de la diversidad, se aboga por descentralizar la Policía Local mejorando la cercanía del vecino al agente, mejorar la fluidez del tráfico con un transporte público más ágil, fomentando el uso de la bicicleta y los coches eléctricos, el medio ambiente y la protección de los animales y se hace hincapié en la innovación tecnológica del cuerpo.