Las copiosas lluvias registradas en la provincia el pasado mes de noviembre, aparte de daños cuantiosísimos en poblaciones como Teba y Campillos, también provocaron desperfectos materiales en la capital. En el IES Miraflores de los Ángeles. Y así sigue desde entonces, dejando a los alumnos sin recreo y limitando el uso de estas instalaciones para realizar actividades al aire libre.

Es peligroso. Se trata de un antiguo paredón del arroyo de los Ángeles, que separa este centro de Secundaria del colegio Gibraljaire. La pendiente no es excesiva, pero el riesgo de sufrir una caída existe. Ya no solo por la brecha sino porque, como denuncian los padres, el muro se mueve.

Rosa Pinto, secretaria del AMPA, se queja de que, en realidad, «el estado general de conservación del centro es bastante penoso. Tiene muchos años y la inversión ha sido nula». «Hemos tenido mala suerte, porque cuando pedimos cita a la antigua delegada nos emplazó a después de las elecciones autonómicas del 2 de diciembre y cuando nos recibió ya se sabía que iba a haber cambio de Gobierno, así que no se ha hecho nada y no fuimos muy bien tratados, precisamente», indica Pinto. Y así han pasado ya tres meses. Sin que nadie se haga cargo de reparar el muro.

Únicamente unas vallas cedidas por el distrito Bailén-Miraflores separan el patio de la pendiente. Y los profesores, que tienen que vigilar para que ningún estudiante se acerque. «Es una gran responsabilidad para ellos», reconoce Pinto, que explica que han sido los propios alumnos los que han solicitado al AMPA y al Consejo Escolar que se tomen medidas.

Esta nueva negativa inicial a arreglar el muro se suma a otros muchos desengaños sufridos por la comunidad educativa de este instituto en los últimos años, «ya que la Junta siempre nos ha dicho que arreglemos los desperfectos con nuestros propios recursos». Pinto recuerda, por ejemplo, que el instituto asumió en su día la retirada de amianto.

Sensación de abandono

«La sensación que tenemos tras más de seis años de falta de respuestas a nuestras necesidades y demandas (como el arreglo del muro y otros que no son atendidos desde hace años por la Consejería) es que el IES Miraflores de los Ángeles somos un centro abandonado. Nos dicen que no a todo sistemáticamente. Y, lamentablemente, no somos el único...», asegura la secretaria del AMPA, quien insiste en que el Miraflores de los Ángeles es un instituto «con aulas masificadas, dónde se han hecho recortes muy elevados (en nuestro caso un 35%) y dónde la escasez de recursos para afrontar gastos corrientes como la compra de material básico es palpable. La tecnología está anticuada y falta equipamiento suficiente para poder desarrollar las actividades académicas», se queja.