El grupo de moda gallego no para de mover ficha en Málaga capital, ya que en menos de un año, cinco de sus tiendas han tenido algún tipo de transformación, traslado y en alguno de los casos, incluso el cierre. Zara, Stradivarius, Bershka y Massimo Dutti son las marcas de Inditex que han sido reposicionadas en Málaga durante el último año, a las que en los próximos meses se le sumarán la línea de bajo coste Lefties.

Sus principales transformaciones comenzaron a mediados de 2017, con el traslado de su pequeña tienda Oysho en la calle Larios, a la acera de enfrente para convertirse en un espacio de dos plantas y 300 metros cuadrados en la esquina con la calle Strachan. Este fue el pistoletazo de salida de una lista de movimientos continuos para reposicionar las marcas del grupo textil dentro de la ciudad e ir incorporando la innovación y nueva estética en ellas. A ella le siguió la reapertura de Stradivarius a principios de 2018. Esta marca ya estaba situada en plena plaza de la Constitución desde 2011, pero tras siete años, la estrategia del grupo cambió y sus intenciones eco se reflejaron en el nuevo mobiliario e imagen de la tienda.

La medidas de refuerzo de presencia y ampliación sólo comenzaban. Durante el pasado año continúo con dos marcas que intercambiaron locales: Bershka y Massimo Dutti. Esta última, con una gran ampliación que se logró tras la adquisición del local paralelo, lo que dio lugar a una tienda de dos plantas y 850 metros cuadrados. Con estos movimientos, el corazón comercial de Málaga cuenta en nuestros días con una tienda Oysho, otra de Pull&Bear, Bershka y el buque insignia de Massimo Dutti.

Por su parte, Zara se hizo en 2018 con el local de la histórica tienda de telas KilocentroZara telas Kilocentro. Unos 700 metros cuadrados que se sumarían a los 1.000 metros cuadrados con los que ya contaba en la calle Liborio García y que todavía, sigue en reformas, las cuales prevén terminarse en el mes de abril. Inditex cierra la representación de sus cadenas con la tienda de Zara Home, en la misma calle que su marca estrella. Fuera de estos metros de oro, la hermana mayor del grupo terminó hace unas semanas de ampliar su tienda situada en el centro comercial Larios Centro centro comercial Larios Centro, a la que se le ha añadido una nueva planta. La consecuencia directa de este cambio ha sido el cierre de la tienda localizada en Vialia. El vacío que deja en este espacio será ocupado en los próximos meses por la marca low-cost, Lefties.

Con todo este juego de ajedrez, la única que queda por aterrizar en el tablero comercial de la capital es Uterqüe, la cadena más joven del grupo y la que representa la exclusividad de Inditex para la moda de mujer.

Todo lo acontecido en Málaga se enmarca dentro de la reorganización de su parque comercial, ya lanzado en 2012, pero que no se ha hecho notar en la Costa del Sol hasta cinco años después. En definitiva, con esta estrategia el imperio de Amancio Ortega pretende absorber todas las tiendas antiguas de superficies reducidas, para integrarlas en puntos mayores. Esta técnica también está siendo aplicada a nivel internacional en ciudades como París, en su bulevar Haussmann, o Milán, en la ya inaugurada tienda del corso Vittorio Emanuele.

Transformación 'ECO'

En 2020 todas las prendas de Inditex llevarán el sello 'Green to Wear', proyecto por el que también las tiendas del grupo deben ser 100% ecoeficientes para entonces. Las nuevas reformas que durante el último año han tenido lugar en las tiendas del grupo textil en la capital se han debido junto a la reorganización de estas, a la consecución se ese objetivo eco.

La transformación de algunos de los espacios de las marcas de Inditex en Málaga que han tenido lugar durante el pasado año y que en algunos casos, siguen ejecutándose, pretenden no sólo esa renovación de imagen, sino cumplir los requerimientos que contribuyen a alcanzar la ecoeficiencia. Los requisitos de eficiencia y sostenibilidad que deben cumplir todos sus establecimientos engloban a todas la instalaciones y sistemas integrados en las tiendas como electricidad, materiales o mobiliario. Estas medidas pretenden que en todas ellas se ahorre un 20% en electricidad, con la consiguiente reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Los mayores ahorros eléctricos se producen en el sistema de climatización, en el cual se estiman ahorros promedios del 40%. Además, se obtiene hasta un 50% en el consumo de agua respecto a una tienda convencional.