El PSOE aprovechará las elecciones del 28 de abril para una renovación a fondo de sus diputados en el Congreso. La revolución sanchista también llegará a las listas que se tienen que configurar en la provincia de Málaga. Pedro Sánchez no quiere un grupo parlamentario con voces discordantes y ahora se le abre la posibilidad de formar un grupo sin fisuras en torno a su figura. El partido ya ha puesto en marcha la maquinaria. La urgencia de los plazos apremia y el 25 de marzo tienen que estar todos los nombres.

En este contexto, ayer se produjo una cumbre socialista en Torremolinos, con presencia de dos de los principales escuderos que tiene Sánchez: José Luis Ábalos y Alfonso Rodríguez Gómez de Celis. El secretario de Organización y el delegado del Gobierno en Andalucía asistieron por la tarde a un acto que organizó el partido en la sede del recinto ferial de Torremolinos, a invitación del alcalde, José Ortiz. Fuentes directas del PSOE confirmaron a este periódico que lo trascendental se debatió, sin embargo, lejos del recinto ferial y la puesta en marcha de la operación entrada y salida se confirmó en un almuerzo al que no estuvo invitado el actual secretario general del PSOE en Málaga, José Luis Ruiz Espejo.

Los representantes actuales del PSOE en el Congreso por la provincia son Miguel Ángel Heredia, José Andrés Torres Mora y Begoña Tundidor. Ninguno de los tres repetirá en las listas al Congreso, que tienen que estar como muy tarde para el 25 de marzo. Así lo confirmaron las mismas fuentes socialistas a este periódico. En cambio, Málaga podrá suponer la rampa de salida de alguien notable del actual Ejecutivo de Sánchez. El partido está barajando la posibilidad de colocar como cabeza de lista a uno de los actuales ministros que componen el gabinete socialista. Sánchez le ha garantizado hueco a los que quieran seguir a su lado. Las fuentes apuntan a dos nombres: el titular de Agricultura, Luis Planas, o, incluso, el de Interior, Fernando Grande-Marlaska.

En los últimos comicios generales, el PSOE logró tres diputados por Málaga. Aunque en el partido tienen expectativas de crecer el 28A y sacar el cuarto, el billete garantizado lo dan los puestos del uno al tres. Teniendo en cuenta que las listas son cremallera, de dos tendría que ir una mujer. La actual subdelegada del Gobierno en Málaga, María Gámez, podría ocupar ese puesto. Después de su marcha de la política municipal, se volvió a reenganchar al partido a través de Sánchez. Aunque su inclusión en la lista dejaría su puesto en la Subdelegación del Gobierno en una transitoriedad incómoda. Como número tres se sitúa a Javier García León, candidato del PSOE a la alcaldía de Fuengirola. Aunque, en principio, se habría autodescartado alegando que su prioridad está en la carrera municipal. Es previsible que haya disputas en las asambleas locales que se tendrán que celebrar ahora, y que haya variaciones, pero la principal hoja de ruta se marcó ayer en Torremolinos.