La discoteca Bobby Logan cerró sus puertas en abril de 1993. Desde entonces el edificio ha estado abandonado y sin encontrar un destino que permitiese recuperar el inmueble, situado en la avenida de Juan Sebastián Elcano. Esto puede acabar en los próximos meses, cuando el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) en Málaga licite las obras para construir su nueva oficina para la zona Este en los terrenos de la antigua discoteca.

Durante los últimos 26 años se ha especulado mucho sobre el destino de la antigua Bobby Logan, y anterior Cine Lope de Vega, inaugurado en 1962. Su actividad ha marcado a varias generaciones de malagueños, primero como cine y luego como discoteca, con varias versiones incluida una típica apuesta de los 80 con una pista de patinaje llamada Rolling. Hasta ocho empresas se han llegado a interesar por hacerse con el inmueble, además del Ayuntamiento de Málaga, que renunció por el alto coste de la operación.

La entrada de SEPE pone fin así a la degradación del inmueble, abandonado desde 1993. La idea de este organismo estatal es rehabilitar el edificio y que acoja las oficina de empleo de El Palo y que ahora se encuentran en los bajos de un edificio de la calle Venezuela. La actual configuración del edificio, además de que fue construido en 1962 como cine, aconsejan plantear un inmueble de nueva planta. Eso llevará al menos tres años para la redacción de los proyectos y su construcción, aunque ya tendrá un destino definitivo.

El edificio, que estaba en venta, había sido objeto de una negociación con el Ayuntamiento de Málaga para su permuta entre 2016 y 2017, sin que tuvieran éxito las gestiones. Mientras se presentaron hasta ocho inversores interesados en el edificio, con proyectos como hacer un gimnasio o una clínica, pero sin que cuajara ninguna de las opciones.

El edificio forma parte de una parcela, situada junto al cauce del Arroyo Pilones, de 3.247 metros cuadrados calificados para uso comercial o de equipamiento, lo que ha dificultado la entrada de posibles inversores. Con la aparición de SEPE se desbloquea esta parcela, con el edificio ocupando unos 900 metros cuadrados y un solar adyacente de unos 2.300 metros cuadrados. Queda por ver cómo se le hace hueco a la exigencia del PGOU actual, que contempla la cesión de una sala de 400 metros cuadrados para actividades vecinales.

Un poco de historia de Bobby Logan

Antes de la discoteca, el edifico acogió el antiguo Cine Lope de Vega y, a principios de los ochenta, una pista de patinaje llamada Rolling. El edificio fue diseñado por el arquitecto Andrés Escassi en 1962 y fue incluido en la guía histórico-artística de Málaga de Rosario Camacho, es decir, contaba con protección arquitectónica, que perdió en el siguiente PGOU, en el de 1997. Para muchos malagueños, es un espacio mítico y añorado que les recuerda su juventud, mientras que los vecinos pretenden que tenga un uso cultural y social en una zona que ha perdido muchas infraestructuras de este tipo desde hace años.

Como dato curioso, fue el único cine de Málaga que apostó por un novedoso sistema de cine en los 60 llamado Olor-o-Visión, que ofrecía una experiencia más completa de la película al incluir olores. De hecho se proyecto el primer largometraje de este sistema. No obstante, el sistema fue un fracaso y no continuó esta experiencia.