El resultado de las últimas elecciones sindicales en el Ayuntamiento de Málaga ha supuesto un vuelco en la constitución de la junta de personal con la postergación de la Unión de Policía Local y de Bomberos (UPLB), que había venido dirigiendo este órgano en los últimos años y que ahora queda relegada a la oposición.

La nueva junta de personal pasa a estar presidida por Manuel Troyano, del Sindicato Independiente de Policía de Andalucía (SIP-AN), respaldado por el Sindicato Andaluz de Bomberos (SAB), CCOO y CSIF.

La primera disposición del nuevo órgano de representación de los funcionarios municipales ha sido dirigir un escrito al director de Personal en el que le reclaman una mayor agilidad en las negociaciones que se vienen realizando desde enero de 2018 para establecer un nuevo acuerdo de funcionarios (convenio colectivo), y de manera perentoria le conminan a que antes del 8 de marzo los sindicatos puedan contar con la propuesta del Ayuntamiento para este acuerdo de funcionarios.

El presidente de la junta de personal transmite al director de Personal la «inquietud entre los funcionarios por la cercanía de las elecciones municipales que marcan una fecha límite para que el acuerdo fuese aprobado».