El Ayuntamiento de Málaga desestima casi la totalidad de las reclamaciones que presentan los ciudadanos por daños causados a consecuencia del mal estado de las calles, de arquetas levantadas, alcorques rotos o del otros elementos del patrimonio municipal, según la respuesta facilitada al grupo de IU Málaga para la Gente.

Los datos al respecto, facilitados por la asesoría jurídica, son elocuentes. En los últimos cuatro años, desde 2015 hasta finales de 2018, de las 1.623 reclamaciones presentadas en este tiempo por ciudadanos reclamando una indemnización por daños, apenas se han atendido 53, lo que supone poco más del 3,26 por ciento en estos cuatro años, si bien hay que señalar que de las 426 presentadas en 2018, hay 220 pendientes de resolver.

La cifra general resulta incluso llamativa si se desciende al detalle y se comprueba que el año que más reclamaciones se atendieron fue el 2017, con 12 reclamaciones de 443 presentadas, mientras que en 2015 hubo 20 reclamaciones estimadas.

La causa de este alto nivel de desatención a las peticiones ciudadanas quizás tenga clave económica, ya que el Ayuntamiento apenas destina dinero par atender este servicio. Quitando el año 2016, cuando el importe de las indemnizaciones ascendió de manera anormal hasta los 196.554 euros, el resto de años las indemnizaciones oscilaron entre los 39.000 euros de 2015 y los 68.937 de 2017.

Servicio semidesconocido

Este servicio, llamado de reclamaciones de daños patrimoniales, se puso en marcha durante la etapa como alcaldesa de Celia Villalobos. La idea era atender y resolver las quejas que presentasen los ciudadanos causadas por daños en la vía pública como consecuencia de caídas, de accidentes por aceras o por arquetas en mal estado u otros incidentes ocurridos en la vía pública.

El servicio, sin embargo, nunca ha gozado de divulgación o difusión por parte de los responsables municipales, por lo que apenas llega al conocimiento de los ciudadanos. De ahí el escaso número de reclamaciones que se presentan cada año, una media de 400 por temporada. De los cuatro años analizados, el que más reclamaciones tuvo fue 2017, con 443; y el que menos 2016, con 364. La tónica es similar para 2018, donde a finales de diciembre había presentadas 426 reclamaciones.

La mayoría de estas reclamaciones no resultan admitidas, mientras un segundo bloque importante son desestimadas.

En correspondencia a este escaso número de demandas y del aún menor número de ellas estimadas, está el dinero destinado a este servicio para el pago de indemnizaciones. Aquí los datos correspondientes a los cuatro últimos años de cantidades que van de los 39.002 euros en 2015 a los 196.554 de 2016, mientras que en 2017 fueron 68.937 euros y en 2018, se ha pagado ya 64.762.

Causas de reclamaciones

En la información facilitada por la alcaldía en respuesta a una pregunta del grupo de IU Málaga para la Gente se explica que en la asesoría jurídica, de quien depende la gestión de este servicio, «no se rechaza ninguna de las reclamaciones presentadas y todas ellas se tramitan y se resuelven» de una u otra manera, atendiendo a la Ley de las Administraciones Públicas.

¿Cuáles son las principales causas de reclamación de los ciudadanos? Las hay de muchos tipos pero generalmente por daños físicos por caídas en la vía pública, daños físicos por caída en una arqueta, daños materiales por accidente en la vía pública, daños materiales en vehículo por caída de un material, daños materiales por actuación del Cuerpo de Bomberos, daños y perjuicios por ruidos o daños materiales en vehículo al ser desplazado por la grúa con motivo de obras.

Causas de denegación

De otro lado, las causas que, según el informe de alcaldía, llevan a desestimar la gran mayoría de las reclamaciones son la no acreditación de la relación entra la lesión sufrida y la actuación o funcionamiento de un servicio municipal, la falta de legitimación pasiva o activa del Ayuntamiento al ser otra la administración causante del posible daño o la no presentación por parte del interesado de todos los requisitos exigidos para la tramitación del expediente.