El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, aprovechó su visita de ayer a Málaga para adelantar algunas medidas que impulsaría de forma inmediata, siempre que salga elegido como presidente del Gobierno en las próximas elecciones generales del 28 de abril. Entre ellas, la eliminación de los aforamientos. Una determinación que defendió ayer, asegurando que impulsará una ley al respecto durante los primeros 100 días de su hipotético gobierno, siguiendo el ejemplo andaluz. En el Parlamento, el actual vicepresidente, Juan Marín, llevará al Consejo de Gobierno de hoy la eliminación de los aforamientos para los parlamentarios andaluces.

Rivera dijo que su «compromiso» es presentar en el Congreso, en los primeros cien días de gobierno, una ley para «suprimir los aforamientos a nivel nacional». Asimismo, expresó su intención de «liderar la protección de los denunciantes» de corrupción, después de que la proposición de ley que planteó Cs en la Cámara Baja haya decaído al disolverse las Cortes antes de los comicios del 28 de abril.

Según aseveró el líder naranja, ni el PSOE ni el PP quieren suprimir los aforamientos. Así, puso como ejemplo la acción de gobierno de Mariano Rajoy, prescindiendo de acometer esta reforma. Igual que Pedro Sánchez, ahora, en estos ochos meses.