Ahora sí. La placa que da nombre a la calle dedicada a Francisco Enrique Díaz Jiménez, el policía nacional que murió en 2014 en acto de servicio en la Carretera de Cádiz, ya incluye su condición de agente del cuerpo por el que entregó su vida a la ciudad. El Ayuntamiento de Málaga se comprometió a completar la plancha tras recibir numerosas quejas el mismo día de la inauguración de la vía en la calle en el barrio de La Pelusa (distrito este) en junio del año pasado. Tras descubrir la placa y comprobar que sólo se leía el nombre del agente, tanto familiares como compañeros del agente transmitieron al alcalde de Málaga que la ausencia de su condición de policía nacional contribuiría a que su nombre y su recuerdo cayeran en el anonimato. La insistencia de la Asociación Jubimálaga ha sido clave para que finalmente la placa haya sido cambiada en los últimos días.

Francisco murió a los 33 años el 21 de mayo de 2014 tras ser apuñalado por un indigente de origen alemán cuando él y sus compañeros de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) trataban de identificarlo en la calle Frigiliana. El Ministerio del Interior le concedió la medalla de oro al mérito policial a título póstumo, la máxima condecoración en el Cuerpo Nacional de Policía. Por su parte, el pleno municipal celebrado en abril de 2015 aprobó una moción institucional proponiendo la denominación de una calle y un mes después se firmó el decreto de concesión. En el texto del acuerdo plenario se recoge que la vía que recuerda al agente «honrará su memoria en señal de respeto a su sacrificio personal en acto de servicio y en reconocimiento y admiración a los valores se seguridad y libertad por los que fue asesinado Francisco Enrique Díaz Jiménez».

Francisco también cuenta con el reconocimiento de la Policía Nacional en los jardines de la Comisaría Provincial, donde se encuentra un monolito con su nombre. Esta iniciativa también contó con el respaldo de una moción institucional del Ayuntamiento y supuso a una distinción a la víctima de toda la sociedad malagueña.