Vega y sus 16 compañeros con necesidades especiales del CEIP Clara Campoamor vuelven a estar atendidos. La Junta ha cubierto la sustitución de la baja del monitor que se encarga de su asistencia y cuidados tras una semana en la que los padres de la pequeña de 6 años, que tiene parálisis cerebral, han tenido que acudir al colegio varias veces al día para que su hija pudiera, entre otras cosas, ir al baño durante la mañana.

Los padres iniciaron una recogida de firmas en la plataforma Change.org -en la que ya han conseguido más de 5.300- para buscar una solución a la falta este profesional técnico de integración social (PTIS). Una vez conseguida la sustitución van un paso más allá y reivindican que 17 niños son demasiados para una sola persona, teniendo en cuenta las necesidades que tienen que van desde la alimentación, al aseo personal, la movilidad dentro y fuera del aula, la supervisión o la aplicación de programas de modificación de conducta.

La Delegación territorial de Educación, Deporte, e Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de Málaga ha explicado a La Opinión que ha realizado las gestiones necesarias para que la Agencia Pública Andaluza de Educación contratase a un PTIS para cubrir la baja de la persona que ocupaba el puesto de monitor de Educación Especial en el CEIP Clara Campoamor de Málaga.

Así, la delegada territorial, Mercedes García Paine, ha asegurado que "la Delegación de Educación es consciente de la importancia de la labor que desarrollan estos profesionales en los centros educativos, por lo que agiliza todo lo posible los trámites administrativos requeridos para proceder a la cobertura de las bajas laborales que se puedan producir". Es por ello que ha subrayado que la sustitución se haría de forma inmediata. De hecho, hoy ha llegado el monitor sustituto.

Maribel Montañez, madre de Vega, ha confirmado que ya ha incorporado el nuevo profesional al colegio y que la delegada se ha puesto en contacto con ellos para "arreglar la situación cuanto antes". Es por las "buenas intenciones" que Maribel asegura que ha mostrado García Paine que van a dar margen a la Delegación a que pueda actuar.

Pero la duda sigue estando en si el nuevo monitor se irá en cuanto vuelva de la baja el anterior. En ese caso, "el problema es que cuando se ponga de baja de nuevo no sabemos qué va a pasar, si volverán a quedar desatendidos". No tienen garantías. Y con esa preocupación piden que haya un monitor de apoyo, para que ante otra baja los niños no queden sin la atención adecuado. Si no les confirman eso, los padres de la pequeña iniciarán el respectivo trámite con el Defensor del Pueblo Andaluz, que también ha mostrado su interés por el caso.