La inminente destrucción del portal de un edificio construido en 1971 por el arquitecto madrileño Antonio Lamela (1926-2015) en el Paseo Marítimo Ciudad de Melilla, 23, en La Malagueta, está movilizando a instituciones, profesores y arquitectos de Málaga y otros puntos de España, que alertan de la pérdida irreparable que supondría su desaparición, por tratarse de uno de los mejores ejemplos de arquitectura española contemporánea. El inmueble, de 16 plantas, no está incluido en el Catálogo de Edificios Protegidos del PGOU.

Las obras de remodelación del portal, que podrían empezar en cualquier momento, supondrán la total destrucción del diseño original del afamado arquitecto, autor de la reforma del estadio Santiago Bernabeu y de las Torres de Colón de Madrid y en la Costa del Sol, de La Nogalera y la urbanización Playamar. Se da la circunstancia además de que el edificio de Ciudad de Melilla, 23 fue uno de los escogidos en una exposición del Ministerio de Fomento que mostraba las obras más representativas del autor.Colegio de Arquitectos

Para el decano del Colegio de Arquitectos de Málaga, Francisco Sarabia, que precisa que el propietario tiene derecho a hacer las obras que considere, «es una lástima que perdamos una de las señas de identidad de la arquitectura contemporánea». El decano también lamentó que «personas sin criterio alteren el trabajo hecho por un profesional» y pidió a los responsables de la reforma «sensibilidad para actuar con delicadeza y preservar el portal».

En la misma línea, Elisa Valero, catedrática de Proyectos Arquitectónicos de la Universidad de Granada, ha enviado un escrito a los vecinos en el que precisa que Antonio Lamela «descendía al detalle y cuidaba los espacios interiores», y subraya del portal de La Malagueta «el techo suspendido en diversas alturas, con remates curvos que revelan la maestría de la época, las paredes de gresite con acabados redondeados» y los buzones de madera suspendidos. «Son elementos singulares y valiosos tanto por la calidad intrínseca de su diseño como desde el punto de vista patrimonial e histórico», añade.

A juicio de la catedrática, el edificio se devaluará si pierde «este singular espacio».

También el arquitecto Carlos Lamela, hijo del autor, ha mostrado su pesar por la decisión, al tiempo que señala que su desaparición «sería una grave pérdida tanto para la propia comunidad de propietarios como sin duda para el patrimonio arquitectónico de Málaga».

Por otro lado, el pasado 27 de marzo, el arquitecto Daniel Rincón de la Vega, de la junta directiva de Colegio de Arquitectos de Málaga, publicó en La Opinión un artículo en el que se hacía eco de esta reforma. «Reparen lo que esté estropeado, cambien algunas cosas, adáptenlo a sus necesidades actuales, pero potencien sus cualidades. Seguro que no se arrepentirán», escribió.

Real Academia de San Telmo

El presidente de la Real Academia de Bellas Artes de San Telmo, José Manuel Cabra de Luna, confirmó ayer que la institución ha enviado un escrito a la comunidad de propietarios para apoyar la permanencia de la obra de Antonio Lamela.

Además, Cabra de Luna precisó que lo que el escrito quiere transmitir es que «muchas veces, la cotidianeidad de nuestra mirada nos impide saber que tenemos algo importante ante nuestros ojos, y estos vecinos están tan acostumbrados al portal que no saben la importancia que tiene».

Por este motivo, San Telmo se ha ofrecido para hacer un dictamen a los vecinos, a través de su sección de Arquitectura, con el fin de que conozcan los valores de la obra, «y luego que decidan lo que quieran».

Comunidad de propietarios

El presidente de la comunidad de propietarios, Mariano Salvatierra, comentó ayer a este diario que las obras de reforma del portal se aprobaron «por unanimidad» en julio de 2018 y que además el proyecto está contratado, por lo que las obras seguirán adelante. «Las cosas no pueden hacerse con retroactividad», dijo.

Además, recordó que la fachada del edificio lleva más de 30 años alterada, «y nadie ha dicho nada» y señaló que los vecinos deseaban cambiar el portal desde 2002 porque se encuentra en un estado «lamentable». Por último, criticó un intento de convocar una junta extraordinaria con el fin de frenar la obra, con lo que considera graves irregularidades.