La oposición municipal rechaza frontalmente la reforma de la Tribuna de los Pobres tal y como se plantea actualmente dentro del proyecto de semipeatonalización de las calles Álamos y Carretería. Las obras para rehabilitar las históricas escalinatas, que se están analizando ahora en las mesas de debate sobre los fondos europeos Edusi entre vecinos y el Ayuntamiento (hoy hay una nueva reunión), no gustan a los residentes, que se quejan de que no se les ha escuchado ni incorporado sus recomendaciones y los grupos de la oposición también se niegan a que se ejecute tal y como se plantean ahora.

En principio, estaba previsto instalar un ascensor para facilitar el acceso a personas con movilidad reducida, integrar el quiosco existente actualmente, cubrir el muro de mampostería con un jardín vertical y hacer una escalinata rectilínea, además de aumentar a dos las zonas de descanso o estancia para personas mayores e impedidos. Luego, un acuerdo (o eso se anunció en su día) entre Urbanismo y los vecinos significó la reconfiguración de los escalones a una forma curva, respetando la filosofía arquitectónica actual, pero sigue sin gustar la iniciativa.

La Tribuna de los Pobres, construida a mediados del pasado siglo, tiene un especial simbolismo para los malagueños, que han seguido desde allí el discurrir de los desfiles procesionales desde hacer varias décadas, reservando muchas corporaciones nazarenas momentos únicos para su paso por este enclave urbano, aunque con el nuevo recorrido muchas han decidido no atravesar Carretería ni esta tribuna, al tener que hacer más metros, espoleadas también por los problemas de seguridad que ha habido en la zona, por ejemplo con la estampida que deslució el paso del Cautivo por allí hace dos años.

El portavoz del PSOE, Daniel Pérez, es claro: "Nosotros hemos tenido una posición en contra del modelo planteado por el Partido Popular desde el principio. Y es que no en vano la Tribuna de los Pobres es un elemento importante de la ciudad, y no debería ser modificado a su antojo. Debe respetarse, algo que no sucede con el modelo actual, ya que es un ejemplo más de destrucción de la identidad de la ciudad. Nuestra ciudad no puede destruir ciertos elementos arraigados a la tradición popular, y la Tribuna de los Pobres es un claro ejemplo".

"La modernización de los entornos y la vanguardia debe conjugarse con la conservación de identidad y de patrimonio, un binomio que parece desconocer la derecha en esta ciudad", declaró Pérez.

El portavoz de IU-MpG, Eduardo Zorrilla, se expresó en los mismos términos: "Oposición frontal a la demolición de la actual Tribuna de los Pobres para realizar un proyecto nuevo que es una escalinata sin ningún otro elemento más que el puro hormigón quitando el muro de mampostería caserón enorme; el diseño queda transformado en algo sin alma ni corazón", en consonancia con lo que piden vecinos y asociaciones.

El viceportavoz de Ciudadanos, Alejandro Carballo, señaló: "Nosotros ya presentamos una alegación en su momento con este asunto. Defendemos que se respete la fisonomía de la tribuna de los pobres con el lógico lavado de cara para adecuarla a los materiales acordes al resto de la obra de semipeatonalización del entorno. Nos gustaría que se integrase, rehabilitada o restaurada, en el proyecto. Pero sin perder su esencia tan querida por los malagueños".

La portavoz de Málaga Ahora, Ysabel Torralbo, señaló: "Nos hemos manifestado reiteradamente sobre la necesidad de que el espacio publico favorezca la interacción social de vecinas y la movilidad personal, por lo que compartimos las demandas de las asociaciones vecinales para que se respete lo acordado. La modificación de la Tribuna, por el contrario, no aporta nada en ninguno de estos aspectos, sino que opera en sentido opuesto, desfigurando un entramado incardinado en las costumbres y tradiciones de la ciudad. Esto se debe, precisamente, a no haber entendido que un proyecto de estas características requiere participación y tener muy en cuenta las aportaciones de las asociaciones. De ese modo, el ayuntamiento habría entendido que hay otros lugares de la ciudad con mucha peor accesibilidad y en los que el ascensor resulta mas necesario".

El edil no adscrito, Juan José Espinosa (Podemos), dice: "Con respecto a la Tribuna de los Pobres, lo consideramos un nuevo atentado contra el patrimonio y la identidad de nuestra ciudad a la que pretenden despojarla de alma". Extiende sus críticas, como los vecinos, a toda la actuación en el eje de Carretería-Álamos. "Creemos que el proyecto no responde en concreto a las necesidades de habitabilidad de los vecinos, y sí está enfocado hacia la imparable tendencia del PP de convertir el centro en un parque temático ampliando su zona de actuación ahora hacia Álamos-carreteria", dijo.