José Antonio Bravo, el conductor de la EMT que sufrió este viernes un infarto mientras iba al volante de un autobús de la línea 1 que terminó arrollando trece vehículos estacionados en la calle Héroe de Sostoa, continúa ingresado en la UCI del Hospital Regional de Málaga a la espera de evolución. El paciente, de 49 años, se encuentra estable dentro de la gravedad, según han precisado fuentes sanitarias al este periódico.

Bravo ingresó ayer en estado crítico tras ser atendido en primera instancia por un pediatra y una médico de familia que viajaban en el autobús en el momento del incidente. Francisco Luis Carrasco, del Centro de Salud de San Andrés-El Torcal, con la ayuda de la médico de familia Clara Sánchez, del Centro de Salud de Huelin, estuvieron realizándole la reanimación cardiopulmonar (RCP) durante diez minutos hasta la llegada de los sanitarios. Estos atendieron a otra quincena de personas, entre ellas tres menores, en un accidente en el que se vieron implicados 13 vehículos -entre ellos una motocicleta y un ciclomotor-, varios árboles, contenedores y causara daños en farolas, algún toldo y una marquesina.