Ciudadanos celebró un acto de cierre de campaña en la plaza Félix Sáenz, donde el cabeza de lista por Málaga, Guillermo Díaz, tomó la palabra para pedir el voto por su formación y para resaltar que Ciudadanos será un martillo pilón contra el nacionalismo. En este sentido, el candidato naranja recomendó a los nacionalistas que pasen por Málaga, y que cambien de pensamiento. Para Díaz, la capital es el ejemplo perfecto de una ciudad abierta y moderna, que encaja en un mundo cada vez más globalizado, y que rechaza las fronteras. El candidato naranja cerró así una campaña en la que se ha convertido en protagonista absoluto, llevando el peso de su formación en Málaga.

Díaz repetirá en el Congreso por segunda vez, después de obtener un escaño en las últimas generales de 2016. Entonces, sin embargo, iba de número dos en la lista, detrás de Irene Rivera. Rivera, en esta ocasión, ha sido desplazada al dos, por lo que la única novedad en la lista ha sido la inversión de los primeros dos puestos.

Díaz estuvo respaldado en el acto por la plana mayor del partido en la provincia. Acudió a Málaga el candidato a la alcaldía de Mijas, Juan Carlos Maldonado, y también asistió el candidato naranja para la alcaldía de la capital, Juan Cassá. Los naranja parten con buenas expectativas. Durante la campaña, Díaz ha evitado hablar de número de escaños concretos, pero la ambición siempre es la de mejorar el resultado de 2016, cuando obtuvo dos. La campaña también ha servido a Díaz para reafirmar la postura de Ciudadanos frente a un posible acuerdo con el PSOE pasadas las elecciones. Imposible, según Díaz, que ratificó el veto establecido con Sánchez. El domingo, Díaz seguirá la noche electoral en la sede del partido en Málaga, junto a simpatizantes y afiliados de la provincia, además de otros cargos institucionales del partido.