El Hospital Clínico es uno de los cinco centros en los que la Junta de Andalucía pondrá en marcha una de las futuras unidades de ictus, un revulsivo a los recursos asistenciales actuales que pasa por la implantación progresiva de la teleasistencia.

Así lo declaró este martes en el Consejo de Gobierno el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, que destinará el próximo año cuatro millones de euros al Plan Andaluz de Atención al Ictus. Mientras tanto, las obras se iniciarán este año en el Hospital Universitario Virgen de Valme (Sevilla), el Hospital Universitario de Jerez, el Hospital Punta Europa (Algeciras), el Hospital Universitario Virgen de la Victoria (Málaga) y el Hospital San Cecilio (Granada).

Recursos de Málaga

Con esta nueva unidad, Málaga contará con unidades de ictus en los dos hospitales públicos. .La unidad del Hospital Regional cuanta con siete camas, neurólogos, neuroradiólgos y neurocirujanos. El Hospital Clínico cuenta con un servicio de Neurología pero ahora contará con una unidad propia para esta dolencia, con neurólogos y neuroradiólogos.

El objetivo que se marca el Gobierno es que para 2020 la comunidad cuente con 84 camas en las unidades de ictus; unas cifras que posicionarían a Andalucía entre las mejores de España y Europa con respecto a esta dolencia neurológica, según informó la Junta en un comunicado.

El Plan andaluz de atención al ictus existe desde hace una década, aunque según el Gobierno andaluz «apenas desarrollado hasta el momento». Para ello, proponen el sistema Tele-Ictus, que tendrá una partida de 200.000 euros en los presupuestos de este año, y estará compuesta por una red de 27 centros conectados a este programa de teleasistencia y en la creación de un «pool» de unos quince neurólogos vasculares de guardia localizable, que ya se ha comenzado a probar en las provincias de Sevilla y Huelva.

Asimismo, el Código Ictus, instalado ya en Málaga, se expandirá por toda la región y el Gobierno elaborará, además, un plan de formación y campañas formativas en las próximas semanas para que la población sepa identificar y actuar ante un ictus si fuera necesario.