Sensibilizar a todo su personal sobre la necesidad de reducir, reciclar y reutilizar residuos es el objetivo del programa pionero puesto en marcha por la compañía alemana FYM-HeidelbergCement en la fábrica de cemento de La Araña. De la mano del Ayuntamiento de la capital, la iniciativa presentada ayer y que se enmarca en el Plan de Acción Social contempla distintas acciones para fomentar el reciclaje. Los talleres de concienciación son el primer paso con el que los trabajadores aprenden cómo pueden ayudar a la llamada economía circular que redunda en el beneficio común.
El director de la fábrica de cemento de Málaga, Enrique Álvarez-Cascos, y Tomás Azorín, director de Relaciones Institucionales de la empresa alemana, explicaron los detalles del programa. «La compañía lleva muchísimo tiempo haciendo esta labor, pero ahora el enfoque ha cambiado para hacerlo más moderno, más estructurado y mirando hacia las necesidades reales del entorno desde la transparencia y el diálogo permanente con los vecinos», afirmó Azorín. Esta empresa está presente en España con tres fábricas, dos en el País Vasco y la de Málaga, que cumple cien años en 2021. «A día de hoy se puede decir que somos la empresa más eficiente a nivel nacional y europeo», resaltó el director de Relaciones Institucionales.
El nuevo proyecto se ha presentado bajo el lema: 'La economía circular: Una responsabilidad de todos'. «Gracias a la economía circular el residuo usado vuelve a incorporarse para su nueva utilización, es una forma de gastar el menor número de recursos naturales», detallaron.
Los trabajadores de la fábrica de La Araña reutilizan la mayoría de sus productos, y si en un caso no es posible, se incorpora como recurso para aprovecharlo para la energía, como es el caso del acero de los neumáticos.
De forma paralela a la concienciación, la fábrica de Málaga ha ido renovando muchas de sus instalaciones para adecuarse a este nuevo proyecto. Por ejemplo, ha incorporado fuentes de agua para eliminar las botellas de plástico y ha colocado papeleras y contenedores para reciclar en todas las instalaciones.
La segunda fase del plan contempla que se traslade a los ciudadanos a través de charlas en colegios y asociaciones. «El objetivo de nuestro programa para un desarrollo sostenible tiene como principal protagonista el servicio a la vecindad», destacó Tomás Azorín.
La presentación de ayer contó también con la presencia de entidades con las que la compañía colabora como la Fundación Málaga, el Club de Baloncesto El Palo (Amfremar).
El presidente de Amfremar, Fernando Gutiérrez, solo tuvo palabras de agradecimiento para los directivos de la empresa: «Si el comedor social de El Palo funciona, es solo gracias a la fábrica de cemento, sin ellos no estaríamos ayudando a las 100 familias que acuden a nuestro centro diariamente».
La empresa patrocina además al Club de Baloncesto de El Palo, con el que lleva colaborando 19 años, y participa en la realización de proyectos con los vecinos más jóvenes de sus barrios.
Para mejorar la calidad de vida de su entorno y fomentar el diálogo con los vecinos, FYM HeidelbergCement creó en noviembre, dentro de su Plan Social, un foro de debate pionero entre la empresa y diversas administraciones públicas: la Comisión de Sostenibilidad, que cuenta también con asociaciones de vecinos de La Araña, Jarazmín, El Candado, La Cala del Moral y El Palo.
