Sobre las 9:00 horas de la mañana de este martes, todo estaba previsto para realizar el desahucio del Museo Taurino, donde se encuentra la colección del empresario Juan Barco. La expulsión del empresario del edificio de la plaza del Siglo, propiedad de la Diputación, se ha frenado cuando todo estaba preparado para su ejecución y en el lugar de los hechos ya se habían personado varios agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local, cerrajero incluido. Barco ha salvado el desahucio "in extremis" al interponer un recurso de casación al Tribunal Supremo, según ha informado el propio empresario, que se ha desplazado hasta Málaga, asegurando, además, que seguirá litigando porque tiene la razón de su parte.

A las 10:30 horas, la delegación de autoridades ha abandonado la plaza del Siglo, otorgando a Barco un nuevo margen, aunque el aplazamiento, realmente, está cogido con alfileres si se tiene en cuenta que la Diputación ya cuenta con una sentencia favorable del TSJA, en la que se constata el incumplimiento de contrato por parte de Barco, con impagos que, ya en 2017, superaban los 150.000 euros. La deuda acumulada por Barco se integra por la falta del abono del canon correspondiente a los años 2015 y 2016, facturas acumuladas correspondientes al suministro de electricidad y agua y, además, la ausencia del pago del IBI correspondiente al antiguo inmueble del Patronato de Turismo que todavía alberga su colección.

Barco se ha mostrado rotundamente en desacuerdo con las acusaciones de impago que se le plantean y ha insistido en que se "siente estafado por los políticos". En concreto, sobre el canon, ha manifestado que no existía como tal en el primer contrato que firmó con la Diputación y que fue añadido a posteriori, causándole un agravio notorio. "El primer contrato que yo firmé no contemplaba ningún canon. Yo me he gastado 1,2 millones en acondicionar este edificio", ha expuesto Barco.

El empresario extremeño ha expresado su claro rechazo al intento de desahucio, tildándolo de "numerito para llamar la atención en campaña electoral". "Han venido con tres cerrajeros, cuando yo he estado aquí con las llaves en mano. Es algo que no se puede entender", ha añadido.

A estas horas, en la institución supramunicipal no hay constancia de la existencia de tal recurso de Barco contra el decreto ni documentación que lo verifique, pero las fuentes han informado de que la Diputación tratará de ser escrupulosa y respetuosa con el trámite administrativo y va a verificar la existencia de ese recurso y contestará como proceda en Derecho. "Queremos ser garantistas", han indicado, siempre que se haya presentado ese recurso que, por ahora, no les consta.