La Fiscalía de Medio Ambiente de Málaga ha incoado diligencias de investigación y se ha dirigido a la Delegación de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta para conocer si la actividad de la Cantera de Sillero, en Churriana, provoca una posible afección "a la calidad de las aguas, del aire o del suelo, o bien sobre el Medio Ambiente o la salud de las personas".

Además, también se ha dirigido a la Gerencia de Urbanismo para que emita informe, "con la falta de actuación del Ayuntamiento en el cierre de la cantera".

La actuación de la Fiscalía responde a la denuncia presentada el pasado mes de febrero por la asociación de vecinos Arcuves, la asociación ecologista Ciriana y la plataforma ciudadana Torre Vigía, en la que recordaba que en el pleno municipal de febrero de 2017 todos los grupos políticos habían votado tomar las medidas pertinentes para cerrar la Cantera de Sillero, "ya que realiza una actividad clandestina e ilegal al carecer de licencia de apertura y urbanística", rezaba la moción aprobada, propuesta por Málaga Ahora.

Sin embargo, denuncian vecinos y ecologistas, el acuerdo no se ha llevado a cabo ni tampoco la apertura de un procedimiento sancionador.

La denuncia enviada a la Fiscalía de Medio Ambiente también señala que la cantera invade espacio público, en concreto la Cañada de Ceuta, además recuerda que en 1981 el Ayuntamiento de Málaga ya emitió un decreto de cierre que nunca se ejecutó y que en el primer mandato de Celia Villalobos, el entonces concejal de Urbanismo, el actual alcalde Francisco de la Torre, "se comprometió al cierre definitivo".

Vecinos y ecologistas también alertan en la denuncia de que la existencia de la cantera "pone en riesgo los acuíferos subterráneos que recorren la Sierra de Churriana". A su juicio, la actividad de la cantera es un elemento "altamente contaminante que pone en riesgo el buen estado de estas masas de agua subterráneas, y, por consiguiente, la salud de las personas y de la flora y la fauna". En este sentido, señala la aparición en la Sierra de fauna cinegética muerta como "un águila calzada, cinco cabras montés, dos zorros, conejos y gatos que hayan sido detectados por vecinos y vecinas" y pide que se investigue si hay relación con la actividad de la cantera.

En 2010, el concejal no adscrito Antonio Serrano, que visitó la zona con varios colectivos, recordó que la cantera tenía abierto un expediente por extracción ilegal de áridos en 3,66 hectáreas de terreno municipal y criticaba al Consistorio por "hacer la vista gorda", dado que el expediente era de diez años antes "y no se aplica una sanción".

En varias ocasiones, vecinos y ecologistas han recogido firmas y se han movilizado para cerrar estas instalaciones. Ahora reclaman que se haga efectivo el acuerdo de pleno de 2017.