La asociación que aglutina a los hosteleros malagueños, Mahos, se reunió este jueves con el alcalde, Francisco de la Torre, para proponer la creación de un código ético que proteja los intereses comunes de malagueños y visitantes, de manera que también se defienda la actividad económica, se garantice el uso y disfrute de los espacios públicos y se mejore la convivencia de los ciudadanos. Su presidente, Javier Frutos, explicó a este periódico que, entre las medidas que estudian, está restringir el derecho de admisión de personas o grupos que no tengan un mínimo decoro, así como la participación activa en la denuncia de comportamientos incívicos en conjunción con la autoridad o hacer pedagogía con la necesaria convivencia en lugares con mayor densidad de visitantes.

La reunión con el candidato del PP a la alcaldía se celebró en la sede de Mahos y también participaron miembros de su junta directiva. Frutos reivindicó la responsabilidad el colectivo empresarial a la hora de planear acciones que redunden en una mayor calidad de la oferta turística local.

Así, recordó como una victoria de la patronal la erradicación de la costumbre de pasear sin camisa por el Centro Histórico, sobre todo en fechas como la Feria, lo que se logró gracias a una campaña insistente de los empresarios, dijo; y apuntó que hoy en día también se registran comportamientos indecorosos, como ocurre en algunas despedidas de soltero o actitudes incívicas de mal comportamiento en espacios públicos, que «también tendrán enfrente a Mahos y sus asociados».

Por otro lado, la asociación se comprometió a impulsar la coherencia estética de las terrazas e instalaciones exteriores de los negocios de hostelería, de la mano del Ayuntamiento, sin perjuicio de la «participación de otros organismos que aporten soluciones técnicas, de ingeniería, de diseño o concepción general, con el objetivo de avanzar en la línea de regularidad de imagen e identificación de actividad.

Pero hubo más temas: la patronal mostró su interés por participar en el modelo de ciudad, por lo que quiere participar en el seno de la Fundación Ciedes, en concreto en sus líneas de trabajo del Horizonte Málaga 2020, sobre todo en asuntos relativos a turismo, creatividad, innovación, empleo, sostenibilidad e integración de los barrios. Una reivindicación de los empresarios es ampliar el centro como zona de influencia.

Asimismo, Mahos exigió que sean tenidas en cuenta las alegaciones presentadas al proceso de declaración de Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS), por ser este «arbitrario, injusto e incompleto, y supone una indefensión general por aplicar actuaciones generales sobre casos particulares». En este caso, Frutos plantea una zonificación previa al proceso del ZAS para determinar si las zonas afectadas (El Romeral y el Centro Histórico) tienen un uso del suelo predominantemente turístico o residencial; y también el reinicio de las mediciones acústicas para la valoración del impacto real actual y los verdaderos focos de emisión, siembre con «una empresa independiente, consensuada y referencia en su sector».

También pide al Consistorio un plan de formación cualificada para personal de hostelería a través del IMFE, así como soluciones al constante problema de aparcamiento en Pedregalejo y una sola voz de interlocución municipal para dar seguridad jurídica.