Smart Pill Alert, un dispensador de pastillas inteligente que provee al usuario de su medicamento a la hora programada, se hizo con el Premio Tecnológico en la I Edición de Ideas Factory Summit, donde concursaba con otros 17 proyectos que provenían de los concursos de Ideas Factory de las universidades andaluzas que se han celebrado a lo largo de este curso 2018-2019.

«Se trata de un dispensador de pastillas electrónico que avisa de la hora de la toma, si esa toma no se ha realizado o si se produce a destiempo, es capaz de alertar a una tercera persona si el usuario no se ha tomado el medicamento. Además, podrán asegurarse desde la distancia de que el paciente ha tomado su medicamento». Así define el proyecto Carlos Sánchez, graduado en Ingeniería de Sistemas Electrónicos y uno de los miembros del equipo de Smart Pill Alert encargado, en concreto, de la parte electrónica y control del dispositivo.

Junto a cuatro compañeros más han desarrollado esta idea: Carmen Jerez, estudiante de 3º de Marketing e Investigación de Mercados y responsable del marketing del proyecto; Elena Pérez, graduada en Bioquímica y encargado de la gestión de cuentas; Juan Miguel Cortés, graduado en Ciencias Ambientales, que se ha dedicado al apartado de ventas, y Michele La Malva Moreno, estudiante de 4º de Ingeniería de Sistemas Electrónicos que se ha encargado del modelado 3D.

Desde todas estas perspectivas abordaron un proyecto enfocado principalmente «a esa persona que está pendiente del usuario para la toma del medicamento, a la tercera persona, al cuidador», explica Carlos Sánchez.

Distinto punto de partida

Una idea que comenzó en la octava edición del concurso Ideas Factory el pasado mes de octubre y que hasta el mes de marzo ha ido desarrollándose y realizando el prototipo. Sin embargo, su propuesta para Ideas Factory era algo totalmente distinto, ya que el germen era una pulsera que mediante un código QR podía detectar si una persona había sufrido un infarto. «Una propuesta que el jurado terminó echando para atrás», recuerda este graduado en Ingeniería.

«Ideas Factory es un concurso de 48 horas para presentar una idea y nosotros casi las primeras 24 estábamos con una idea distinta y al final tuvimos que hacer todo de prisa y corriendo. Fue como un bombardeo en momentos de tensión, y finalmente surgió la idea del pastillero electrónico; la desarrollamos lo más rápido posible. Parece que gustó al jurado y conseguimos el acceso para ir al Factory Summit, que es algo así como la edición autonómica», explica sobre los inicios de un proyecto que ha logrado la victoria en el citado certamen celebrado en Sevilla en el que competía con otras 17 propuestas, entre ellas otras dos malagueñas. En total, el festival IFSUMMIT 2019 reunió a más de 600 personas en torno al emprendimiento universitario.

Tras este gran paso, el equipo se encuentran en la fase de constitución de un 'pacto de socios'. «Estamos viendo el tema legal de la empresa y nuestro objetivo es presentarlo a los premios Spin Off de la UMA que se celebrarán en junio. Después del Spin Off queremos intentar dar el salto a una empresa de verdad; estamos ultimando las cosas para hacerlo lo mejor posible y poder lanzarlo al mercado», cuenta emocionado Carlos Sánchez.

«Todos tenemos a una persona que necesita tener control en sus pastillas. Es muy importante seguir los tiempos, si conseguimos evitar eso podemos conseguir más seguridad, porque al fin y al cabo por esos fallos pueden pasar cosas terribles», concluye.