El ritmo de creación de empresas lleva unos meses a la baja en España, una tendencia a la que tampoco escapa la provincia de Málaga. El número de firmas constituidas en los cinco primeros meses del año rozó las 44.000, con un descenso del 2,7% en relación al mismo periodo del año anterior, según los datos publicados ayer por Axesor. En el caso de la provincia malagueña, la cifra es de 2.311, con una bajada del 10,6%. La agencia de rating explica que el retroceso del emprendimiento es generalizado en los sectores fundamentales de la economía española, siendo la industria manufacturera la principal responsable del ajuste, aunque también retrocedieron construcción, comercio y hostelería.

Las cifras colocan a Málaga como la cuarta provincia española donde más firmas se crean tras Madrid (1.020), Barcelona (7.021) y Valencia (2.421), según los datos recopilados por Axesor. La economía malagueña se confirma así como una de las más dinámicas de España aunque este 2019 refleja un frenazo en el ritmo de creación de nuevos negocios. Málaga concentra además, como es habitual, un tercio de todas las empresas que se constituyen en Andalucía (7.244 hasta mayo).

De hecho, Málaga acabó el año 2018 como la tercera provincia española donde se creaban más empresas (más de 5.400) después de Madrid y Barcelona (21.600 y 14.200, respectivamente) y por delante de Valencia (5.389) que ahora, de momento, recupera la tercera plaza.

Málaga alcanzó su ritmo tope de creación de empresas entre 2003 y 2005, a un ritmo anual de más de 7.000. A raíz del estallido de la crisis, en 2008, empezó progresivamente a menguar hasta llegar a un suelo de algo más de 3.500 en 2010. A partir de ese momento empezó a subir de nuevo. En 2018 fueron más de 5.400 en todo el año. En este 2019, se mantiene la tendencia registrada hasta ahora, la cifra se quedaría en unas 4.800 constituciones.

Según Axesor, en España se registraron caídas en el emprendimiento en 14 de los 20 sectores en los que se divide la actividad económica. La suavidad en el descenso general (-2,7%) viene solo determinada por un gran crecimiento relativo de la actividad emprendedora en el sector del suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado.

Por contra, la creación de empresas en la industria manufacturera se contrae un 9,6% y en la construcción un 3,6% . El emprendimiento en las actividades inmobiliarias, muy vinculadas al ladrillo, registró también un descenso del 6,5%, al tiempo que el comercio regresó a la senda de caídas, con un 6,4% menos. Para Axesor, la actividad emprendedora en este último sector se está viendo «fuertemente afectada por la rápida expansión del comercio online y la caída del nivel de ahorro en los hogares, que influye en el gasto del consumidor». La hostelería se suma al descenso con un 8% menos de negocios constituidos.

Entre los seis sectores en los que creció la actividad emprendedora destaca el del suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, con una subida interanual del 125%. Le siguen las actividades extractivas (un 12,1%) y las administrativas y servicios auxiliares (un 4,65%).