La acumulación de lluvias en el otoño y primera parte del invierno en Málaga capital provocaron daños en la muralla exterior de la Alcazaba de Málaga, en concreto en un tramo que tuvo que ser apuntalado en febrero por el desprendimiento de algunas piezas del muro. Ahora el Ayuntamiento de Málaga va a reparar ese tramo, gracias a la aprobación de una inversión de 150.000 euros y la adjudicación a Hermanos Campano de esta obra, que comenzará a finales de este mes, aseguran desde el Ayuntamiento de Málaga.

Los trabajos tendrán como principal objetivo consolidar y asegurar el muro, con idea de evitar nuevos desprendimiento y quitar las piezas que lo apuntalan. Para ello se reintegrarán las piezas que se cayeron en febrero y se asegurará la estabilidad de toda la estructura.

Pese a estar apuntalado, el muro no representa ningún riesgo para los peatones que visitan el Paseo de Don Juan Temboury, ya que entre el tramo y la calle hay unos tres metros de ajardinamiento y el estado del muro es, en general, bueno salvo en la parte que se va a actuar.

Esta inversión también incluyen varias pequeñas obras de mejora en el Castillo de Gibralfaro, aunque no la restitución del tramo de muralla interior que se desprendió en noviembre por las lluvias. Esta intervención será posterior, ya que los daños fueron bastante importantes y requiere de una intervención más compleja.