Ha fallecido este domingo en el Hospital CHIP a los 82 años Horacio Eichelbaum, periodista argentino radicado en Málaga y excolumnista de La Opinión de Málaga, opinador progresista y siempre incómodo, asiduo participante en movimientos sociales.

La trayectoria de Eichelbaum es fecunda y variada. En su país natal coordinó programas de televisión dedicados a la cultura, como 'La ciudad creadora', trabajó en agencias de prensa de organismos estatales y privados y hasta firmó canciones de éxito como 'La del televisor'. Fue redactor, corresponsal o colaborador de diversas publicaciones como 'La Marcha de Montevideo', 'Tiempo' de la Ciudad de Méjico, 'Paese Sera' de Roma. En España, fue corresponsal de diario Informaciones, colaborador de los diarios 'El Independiente' y 'El País' y de las revistas 'Interviú', 'Posible' y 'Tiempo'.

Eichelbaum nació en una familia de gran prestigio intelectual: su hermana, una de las más decisivas sociólogas de su país; su padre, un dramaturgo de los que se estudian en la Secundaria argentina y amigo de tótems culturales, como, por ejemplo, Federico García Lorca, tal y como recordó el periodista en una ocasión para este periódico: "Cuando Lorca vino a Buenos Aires estuvo con mi padre y mi tío, además de otros intelectuales que fueron a verle, porque figúrese, era Lorca. Lo que pasa es que fue en víspera de elecciones y entonces se prohibía beber en esa fecha. Todos los bares estaban cerrados, pero uno de ellos bajó el cierre y dejó que festejaran todos dentro. La policía los vio y se los llevó a comisaria, incluido a mi padre y a Federico".

El argentino siempre se la jugaba en sus escritos. Se exilió en España, en 1974: su nombre figuraba en la lista negra de la dictadura de su país. Dice que cuando llegó aquí tenía la sensación de "haberse salvado". En nuestro país, precisamente, no mantuvo una actitud discreta y silenciosa. Valga el ejemplo del semanario 'Imagen de Marbella', que creó y dirigió como un experimento de periodismo de izquierdas, combativo y ruidoso en pleno corazón de la jet set y las noches de fiestas interminables de Banús.

Siempre crítico con el capitalismo, con los resortes del sistema que siempre olvida a los más débiles, y representante de un periodismo reflexivo, duro consigo mismo, la antítesis de la condescendencia. "Pasamos del todo es noticia al nada es noticia. Da lo mismo: uno y otro son discursos repetidos hasta el agotamiento y que nadie quiere ya escuchar. Se me antoja que también a los que escribimos sobre la actualidad nos ha llegado la hora de ajustarnos a unas plantillas. Para presentarlas como grandes temas a veces se llega al desiderátum: son asuntos que incendiaron las redes. Un incendio en las redes se apaga solo, más rápido mientras menos nos preocupemos. Al revés que los incendios reales que requieren creciente ocupación y preocupación", se puede leer en uno de sus últimos artículos para este periódico, 'Fracaso planetario' (15 de agosto de 2017).

Ha fallecido Horacio Eichelbaum, pero su hemeroteca digital de La Opinión de Málaga sigue a disposición del que quiera mirar la realidad a través de los ojos de un tipo aquilatado, de una pieza, comprometido y duro en sus análisis. Descanse en paz.