El año pasado Málaga se convirtió en la provincia de la comunidad andaluza que sufrió más agresiones a médicos y sanitarios con más de 300 casos registrados, una situación que el Sindicato Médico de Málaga califica como «la tónica habitual».
Tras la última agresión en el centro de salud de San Pedro Alcántara a una médico y dos enfermeras y la consiguiente manifestación, el Colegio de Médicos de Málaga ha pedido a la Junta de Andalucía que adopte una «solución urgente y definitiva» para que no se repitan estas situaciones.
Cinco centros abiertos
En pleno inicio del verano, solo tres centros de salud-Cruz de Humilladero, El Palo y Puerta Blanca- y dos consultorios -El Cónsul y La Roca- estarán abiertos en horario vespertino, de tres a ocho de la tarde, hasta el 16 de septiembre.
Frente a esta situación, el delegado provincial de Salud, Carlos Bautista ha afirmado que «ha habido aproximadamente un 17% más, en términos generales, de contrataciones y un 20,6% de presupuesto para afrontar el verano» y que se harán guardias pagadas designadas, o bien voluntariamente, o mediante sorteo entre los profesionales sanitarios.
En relación a las frecuentes agresiones a médicos y sanitarios, Carlos Bautista ha reconocido que la medida no es suficiente y ha apelado a la falta de educación de una parte de la población como una de las causas principales de este tipo de ataques. «Esto no es solamente un problema de vigilancia policial, es un problema de educación», ha explicado.
En este sentido, el titular de Salud en Málaga ha asegurado que, pese a que es un proceso «lento y complicado», van a impulsar la imposición de sanciones a aquellas personas que agredan a un profesional sanitario, una de las medidas demandadas por el Sindicato Médico de Málaga, y promoverán así un cambio que debe propiciarse desde el Gobierno central. « La población que insulta no se va a ir de rositas y le va a picar en el bolsillo», ha sentenciado.
