El autor de estas líneas les propone un ejercicio de ciencia ficción, absténganse pues los realistas:

En lugar de a Pilar Rahola, Eduardo Inda y Francisco Marhuenda, asiduos de tertulias en las que es obligatorio gritar cada dos minutos, sienten a Miguel de Cervantes, Ramón del Valle Inclán y Miguel Delibes, no para debatir sobre los cansinos pactos políticos sino sobre la situación del español en el mundo.

Corteses como son -aunque los dos primeros, con un ramalazo impetuoso, como demuestran los lances en los que se fastidiaron seriamente el brazo- puede que no suelten tacos delante de la cámara, pero darán un respingo en sus asientos cuando conozcan que en nuestra ciudad, el congreso en el que durante una semana se analiza la situación de la enseñanza de español para extranjeros lleva por nombre Málaga Education Week.

Cierto, no es ninguna broma ni hay cámara oculta. Tan ausente de complejos está la enseñanza de la lengua de Quevedo como para titular un encuentro de este tipo en el idioma de Boris Johnson -quién sabe si el próximo rubio loco anglosajón que aspire a gobernar un país, después del ejemplar de la Casa Blanca-.

Pues que se preparen estos insignes tertulianos porque nuestro Ayuntamiento ha querido continuar con la promoción del inglés en todos los ámbitos y acaba de informarnos de la instalación en la antigua plataforma del tranvía, en El Morlaco, de un «parque deportivo de Street Workout».

Gracias al dominio que todos los malagueños tenemos del inglés desde chiquititos, y para eso estamos tan cerca del Peñón, este feliz mensaje municipal ha llegado a todos los hogares de forma inteligible, que es lo que se pretendía.

En todo caso, por si hubiera dudas y aunque algunos de nuestros políticos lo desconozcan, nuestro idioma es lo suficientemente rico como para no tener que emplear por sistema estos anglicismos que a algunos malagueños raritos -entre lo que se encuentra un servidor- tanto les sonroja.

En realidad, si retiramos toda la pompa y circunstancia del anuncio, lo que el Ayuntamiento ha instalado en El Morlaco son varios aparatos para un deporte conocido en español como entrenamiento callejero (para que ustedes lo entiendan, Street Workout).

La nota que informa de la novedad, por otro lado, tiene muy en cuenta a la gran masa de malaguitas bilingües porque les aclara que la «zona de flexiones» se denomina «Push up bars». Gracias de corazón.

Por cierto, será una tontería, pero la Fundación de Español Urgente, que está asesorada por la Real Academia Española, recomienda que a la modalidad deportiva Street Workout, en España se le llame mejor «entrenamiento callejero» o «entrenamiento de calle».

Incomprensible.