El alcalde, Francisco de la Torre, quiere iniciar este mismo mandato la ejecución de las obras del plan asociado al soterramiento de 2,5 kilómetros del eje litoral, desde las proximidades del Guadalmedina. Ello cuesta 277 millones de euros y se necesita dinero, mucho dinero. Así, presentó ayer al pleno una moción que salió adelante con los votos de PP y Cs (16), y cosechó trece sufragios en contra (PSOE y Adelante Málaga) en la que básicamente pide a la Junta y al Gobierno que lo ayuden a financiar la obra, que aporten fondos europeos también y que él se afanará por conseguir el líquido que necesita buscando entre los bolsillos privados.

El primer punto es que el Consistorio insta a la Junta y al Gobierno a apoyar el nuevo modelo de movilidad metropolitana en cuyo diseño se está trabajando y a compromoterse a buscar fórmulas de financiación por parte de ambas administraciones incluyendo la captación de fondos europeos, en paralelo a la labor de búsqueda de financiación procedente de la iniciativa privada para complementar la inversión a realizar en este proyecto que debe comenzar a planificarse ya para poder ejecutar a medio y largo plazo.

En segundo lugar, el Ayuntamiento se comprometió a realizar los estudios de demanda de transporte público metropolitano, geotécnicos en los terrenos menos estudiados, de viabilidad y cuantos sean necesarios para avanzar en estos trabajos (incluye, entre otros aspectos, el soterramiento del eje litoral, la creación de dos intercambiadores, aparcamientos y otras infraestructuras), a darles publicidad y a prever la financiación municipal posible en los próximos ejercicios, «teniendo en cuenta que se requerirá la colaboración de otras administraciones y la iniciativa privada para poder llevarlos a cabo».

El regidor malagueño aseguró que es un proyecto de Estado, que «tenemos derecho a hacer» igual que ejecutó su soterramiento Barcelona y recordó que, cuando la ciudad quiso empezar a recorrer el camino, «algunos nos pararon, poniéndonos palos en la rueda». El portavoz de Adelante Málaga, Eduardo Zorrilla, por su parte, le dijo que se trata de obras «faraónicas, costosísimas y especulativas para vender oficinas y hoteles con dinero público mientras se abandonan los barrios», mientras Mariano Ruiz Araújo, del PSOE, insistió en que los malagueños están cansados de tantas obras «y tantas calles levantadas» y pidió al alcalde que plantee soluciones modernas «y no del siglo pasado», además de exigir que se elimine el barniz de «grandeza faraónica».

La portavoz de Cs, Noelia Losada, pidió consenso y destacó que soterrar el eje litoral abriría definitivamente el puerto a la ciudad que lo acoge.