El otro gran tema del pleno de este martes (correspondiente al mes de septiembre) es, sin duda, la situación que atraviesa el Málaga Club de Fútbol. Todos los grupos llevan mociones al respecto, las del PP y Cs algo más políticas y declarativas, mucho más duras las del PSOE y Adelante Málaga. De cualquier forma, el alcalde, Francisco de la Torre, fue ayer tajante en rueda de prensa: «La propiedad actual debe tratar de darse cuenta de la existencia del plan de viabilidad y, si no puede cumplir, debe facilitar que otro venga y lo cumpla».

El alcalde señaló que la idea de la moción del PP es respaldar a la afición, que hay coordinación con la Junta y la Diputación, como otras instituciones propietarias del estadio de La Rosaleda, y señaló que el «futuro pasa por el control de la Liga, por el plan de viabilidad que el Málaga debe cumplir», para insistir luego en la necesidad de ver cómo articular los puntos contenidos en las distintas mociones. Habló de control del club y de la fundación, que debe construir la Academia. De hecho, el miércoles se va a reunir la comisión de seguimiento de la Fundación, con el fin de dar un mensaje de colaboración y control para que la Academia se haga. «La propiedad actual debe tratar de darse cuenta de la existencia del plan de viabilidad y, si no puede cumplir, debe facilitar que otro venga y lo cumpla», añadió.

Daniel Pérez, portavoz del PSOE, va más allá en su moción y considera que, al llevar más de seis meses paradas las obras de la Academia en los terrenos de Arraijanal, hay que aplicar las cláusulas del convenio que dan marcha atrás a la concesión demanial por 75 años de esos terrenos, cedidos al jeque Al-Thani, para hacer la ciudad deportiva del club, con el fin de que si este entrara en concurso de acreedores esos terrenos, que costaron mucho dinero a la ciudad, «no queden en manos de los privados». También exigió que se haga allí el parque marítimo terrestre previsto inicialmente y una reducción de sueldos de la familia catarí, así como una bajada en los gastos de alojamiento y la línea de crédito. La idea es impedir que el Málaga «pueda desaparecer». Zorrilla, por su parte, insistió en esta línea y pidió la caducidad de la licencia de las obras de la Academia, al llevar mucho tiempo paradas. Recordó que ahora el Málaga Club de Fútbol debe recibir más de cuatro millones de euros que deberían ir a sufragar la Academia, pero ironizó con la posibilidad de que la familia se embolse esa suma para volver a su país «con sus hijos los bien pagados».

La moción socialista propone estos acuerdos: que el pleno inste al equipo de gobierno a iniciar cuantos trámites sean necesarios para revocar y extinguir la concesión demanial que pesa sobre la Fundación Málaga Club de Fútbol de los terrenos de Arraijanal; a que, una vez recepcionados los suelos, el equipo de gobierno se sume al parque metropolitano, sin que no pueda darse otro uso que zona verde protegida; instar a Emasa a que adopte las medidas necesarias para evitar que vuelvan a producirse vertidos fecales en la zona, de especial protección; pide al equipo de gobierno que dé cumplimiento a las mociones ya aprobadas y retire el nombre de Abdullah Ben Nasser Al-Thani de la glorieta ubicada en la avenida Luis Buñuel y sea sustituida por el nombre 'Glorieta Afición Malaguista'. Por último, los socialistas reclaman que el Ayuntamiento muestre su apoyo y agradecimiento a los integrantes del Málaga.

Noelia Losada, portavoz de Cs, lleva una moción en la que pide al Ayuntamiento que muestre su apoyo y reconocimiento a los jugadores, técnicos y empleados del equipo; que el Consistorio inste al Consejo de Administración a que tome conciencia de la situación real del club y muestre transparencia en su gestión, comprometiéndose con la viabilidad futura; y reclama al Consistorio que siga trabajando por la continuidad del club con otras instituciones.