La provincia de Málaga sigue liderando un año más el ranking andaluz de población extranjera residente y número de trabajadores foráneos, según el último informe sobre esta materia publicado hace unos días por el Observatorio Argos de la Junta de Andalucía. Málaga, en concreto, reúne cerca del 40% de los 621.400 extranjeros que residen en la comunidad (casi 233.000 personas) y el 29,7% de los casi 240.000 cotizantes no españoles que registró de media la Seguridad Social en la región durante 2018 (más de 70.000 afiliados). A Málaga le sigue Almería, que concentra otro 22,46% de residentes y un 24,6% de afiliados. Por otro lado, si en Andalucía la proporción es de siete personas extranjeras por cada cien personas empadronadas, en la provincia de Málaga esa tasa es de 15 y en Almería de 20.

De los veinte municipios andaluces con mayor número de personas extranjeras empadronadas, ocho pertenecen a la provincia de Málaga, lo que también evidencia su enorme importancia en este apartado. A la cabeza aparecen Málaga capital (43.563 extranjeros residentes) y Marbella (33.451), con puestos también relevantes para Mijas (25.510, sexta), Fuengirola (24.002, séptima) , Benalmádena (16.188, novena), Estepona (14.483, undécima), Torremolinos (13.688, duodécima), y Vélez Málaga (7.455, decimosexta).

La provincia también presenta casos como el de Benahavís, uno de los cuatro municipios andaluces donde el peso de la de población extranjera supera a la nacional. En el caso de esta localidad malagueña, los foráneros representan un 63,7% del total. Las otras tres son Partaola, Arboleas y Bédar, todas en Almería. En el caso de estas localidades almerienses, el predominio extranjero responde al peso en la economía del sector agrícola (invernaderos), mientras que en Benahavís obedece a la presencia del turismo residencial. Otros municipios malagueños con un peso relevante de personas foráneas son Cómpeta (un 45,1%), Viñuela (44,1%), Sayalonga (43,5%), Alcaucín (38,5%), Manilva (35,3%), Sedella (34,4%) y Comares (34,3%).

Contratos y puestos

El informe, titulado «Las personas extranjeras en el mercado de trabajo andaluz. 2018», señala que la población extranjera firmó en la provincia de Málaga, en conjunto, un total de 98.116 contratos de trabajo el pasado año (un 13,8% más que el año anterior) y que las ocupaciones que propiciaron más contrataciones para este colectivo fueron las de camareros (18.055 contratos), peones agrícolas (7.961), ayudantes de cocina (7.199), personal de limpieza (5.595), vendedores en tiendas o almacenes (5.402), cocineros (4.400), empleados domésticos (3.729), albañiles (2.900), teleoperadores (2.648) y peones agropecuarios (2.476).

Por razones de peso poblacional y económico, los grandes focos de empleo a nivel geográfico son Málaga capital y Marbella, donde se firmaron respectivamente 27.834 y 18.274 contrataciones en 2018. De esta forma, estas dos localidades generaron más de la mitad de contrataciones para extranjeros en la provincia durante el pasado año (exactamente el 46,9%).

El estudio de Argos, organismo dependiente de la Consejería de Empleo, Empresa y Comercio señala que, a nivel andaluz, la población extranjera ha decrecido en la comunidad durante la última década en 53.784 personas. «No obstante, es importante destacar que la población extranjera creció hasta 2012, año en que se da un cambio de tendencia y comienza a darse un descenso, contabilizándose así 125.714 personas extranjeras menos entre este año y 2018», apunta el informe.

Atendiendo a su lugar de origen, un 43,5% de los extranjeros residentes en Andalucía proceden de la Unión Europea, un 28,1% de África y un 11,6% de América del Sur. En cuanto a los principales países de ascendencia, destacan Marruecos (21,9%), Rumanía (13,1%) y Reino Unido (13,1).