El presidente de la Asociación de Vecinos ‘Palma-Palmilla. Un nuevo futuro’, Francisco García Vigo, ha denunciado la inseguridad en seis barrios del distrito de Palma-Palmilla (La Virreina, 26 de febrero, La Palma, La Palmilla, las 720 viviendas y las casas mata) y ha criticado el «desinterés» de la subdelegada del Gobierno, María Gámez, a la que le pidió una reunión técnica en enero. «Y me ha ofrecido una reunión informativa, cuando soy yo el que tendría que informarle».

García Vigo, que en el pasado pleno municipal denunció la inseguridad y aprovechó para pedir la dimisión de María Gámez, precisó a La Opinión que «es ilógico de un país civilizado mantener a una población armada», y explicó que en esta zona de Málaga «hay bastante gente con armas y sin licencia».

Y aunque admitió que ahora hay menos tiroteos, destacó que, «antes, hace 30 años, si había una rencilla te sacaban una navaja y ahora te sacan una pistola y el problema es que no sabes adónde va esa bala, hay gente que les ha entrado balas por la ventana».

En este sentido advirtió de que «aquí no harán nada hasta que les pase algo a unos policías, porque mientras los tiros se los peguen a los vecinos, les da igual».

«Nuevos delitos»

El presidente vecinal explicó que el problema de la droga ha pasado «a un tercer nivel» en estos barrios, en parte por las actuaciones policiales y en parte por la crisis. Pero a la vez, destacó que «han aparecido nuevos delitos».

Uno de ellos, la proliferación de prestamistas ilegales. «Es gente particular que concede préstamos a muy alto interés. Normalmente tienes que pagar un cuota fija semanal bastante alta, más la deuda, que queda pendiente.

El responsable vecinal resaltó que «si no pagas, ejercen la violencia, te echan del barrio, te echan de tu casa. Eso está ocurriendo».

También llamó la atención sobre la proliferación de alquileres ilegales de pisos que, en realidad, pertenecen a los bancos.

«Hay un grupo de gente que se está adueñando de esas viviendas, alquilándolas de forma ilegal y haciendo creer que son suyas. Cuando el banco las detecta, presentan una denuncia pero sobre el inquilino que, supuestamente, está pagando su cuota legal». Como resultado, señaló, ya se han producido varios desahucios de este tipo, el último, pendiente de resolución, el de una familia con tres hijos.

«Normalmente estas personas están amenazadas porque si denuncias a quien estás pagando,va a haber represalias», indicó.

Francisco García Vigo también comentó que «La Palmilla cambia de día y de noche, porque bares y tiendas que durante el día están cerrados, los abren de noche con otro tipo de negocios: venta de alcohol, de droga, te venden todo lo vendible y hay gente que va a emborracharse y está hasta las 5 o 6 de la mañana, con lo que la gente que tiene que trabajar no puede dormir».

El dirigente vecinal insistió en que lo que quiere es mantener con la subdelegada «una reunión técnica, con la Fiscalía, con la Policía Nacional, con la Subdelegación del Gobierno, para plantear todo el problema y ver qué planes de actuación se pondrán en marcha». «¿Qué medidas ha tomado desde que es subdelegada del Gobierno?, yo no he visto nada», concluyó.

Una portavoz de la Subdelegación del Gobierno respondió ayer que este órgano del Gobierno central está «totalmente concienciado y sensibilizado con la seguridad en La Palma-Palmilla».