«Sin precedentes». «Un éxito». «Histórica». Así definen desde Jupol, el sindicato mayoritario de la Policía Nacional, la inspección que la Secretaría de Estado y Seguridad y la Inspección de Trabajo realizaron el pasado martes en el área de calabozos de la Comisaría Provincial de Málaga tras la denuncia que la organización tramitó la pasada primavera al entender que estas instalaciones presentan desde hace años importantes deficiencias que afectarían tanto a los policías que trabajan en esa zona como a los detenidos.
Según fuentes del sindicato, la visita duró algo más de dos horas que se repartieron entre una reunión previa de unos 45 minutos y el posterior recorrido de hora y media por las zonas que requieren mejoras. La comitiva estuvo liderada por una inspectora de los servicios de Inspección de Trabajo y Seguridad Social que comprobó personalmente algunas de las irregularidades en materia de higiene, seguridad, mantenimiento, iluminación, insonorización, salubridad del agua y calidad del aire que sacó a la luz la denuncia. Tanto es así, que la funcionaria levantó acta durante la visita y solicitó varios informes técnicos en torno a las irregularidades, añaden desde el sindicato.
La cita contó con una representación de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior y de otros sindicatos. Las mismas fuentes añadieron que se ha tratado de una visita «pionera» que puede ser beneficiosa para otras comisarías del país. «Nunca se ha dado esta situación, es la primera vez que hemos visto que se haga algo así y los compañeros que han venido de Madrid han tomado nota para el resto de España. Hemos tocado una puerta sin tener apenas idea y se ha abierto de par en par», aseguran desde Jupol. En declaraciones a este diario, el secretario provincial, Miguel Millán, agradeció el interés mostrado por la inspectora de Trabajo durante la visita. La denuncia se tramitó en abril y reflejó graves deficiencias desde hace al menos dos años y en una zona de trabajo para casi un centenar de agentes y en la que los detenidos pasan muchas horas antes de pasar a disposición judicial. Más de treinta páginas necesitaron los responsables del sindicato para reflejar problemas que podrían vulnerar los derechos más fundamentales tanto de los trabajadores como de las personas privadas de libertad. El informe recuerda que esta zona se encuentra en el subsuelo, circunstancia que sumada a los deficientes sistemas de ventilación provoca unas condiciones de humedad y de calidad del aire poco recomendables, sobre todo durante los meses de verano.
