Agentes de la Policía Nacional han detenido en Málaga a un hombre de 24 años y nacionalidad marroquí como presunto responsable de cinco delitos contra el patrimonio cometidos en establecimientos hosteleros de la zona centro.

Las investigaciones han permitido el esclarecimiento de cuatro robos con fuerza y un hurto perpetrados entre los días 24 de octubre y el 13 de noviembre en distintos establecimientos donde el investigado haciéndose pasar por un cliente más se encontraba alojado cuando se produjeron los hechos.

Inicio de la investigación

La investigación se inició el pasado día 24 de octubre, a raíz de la denuncia interpuesta ante la Policía Nacional por un turista que, mientras se encontraba alojado en un céntrico hostel de la capital malagueña, había sido víctima del robo de su ordenador valorado en 1.800 euros.

El día uno de noviembre, una turista denunciaba haber sido víctima de la sustracción de un ordenador portátil, una cámara fotográfica y un disco duro. Los hechos se produjeron en un hostel de la zona centro donde se encontraba hospedada. El mismo día y a la misma hora, otro huésped del mismo establecimiento denunciaba un que le habían robado su portátil.

Días más tarde, el día 13, se recibían otras dos denuncias de dos huéspedes alojados en un hostel de Málaga que habían sido víctimas de sendos robos. A una de ellas le habían sustraído dinero en efectivo, dos juegos de altavoces y un cargador -todo valorado en unos 400 euros-. Mientras que al segundo denunciante le habían robado un ordenador valorado en más de 900 euros.

Los hechos obedecían a un idéntico modus operandi en los que las víctimas eran turistas extranjeros que se encontraban hospedados en alojamientos de tipo compartido -en ellos varios clientes comparten habitación, pero otros tienen la posibilidad de alojarse en una habitación individual- y a las que enajenaba cualquier tipo de equipo electrónico, documentación y dinero en efectivo.

Según las primeras pesquisas, el ladrón aprovechaba los momentos en que se quedaba solo en la habitación compartida o que los huéspedes se ausentaban de sus habitaciones individuales para, tras romper la puerta del armario o taquilla, hacerse con los efectos de valor que hallaba en su interior. Seguidamente abandonaba el establecimiento sin llegar a pernoctar en él. De esta manera se habría hecho con un botín próximo a los 6.000 euros.

Fruto del dispositivo establecido, el hombre fue localizado y detenido en un establecimiento hostelero donde se encontraba alojado en Marbella (Málaga).

Cabe destacar que el investigado accedía a nuestro país como turista, aprovechando su estancia para cometer sus delitos y regresando después a su país de origen.