La chimenea de La Malagueta de calle Maestranza, en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz desde 1996, coincidiendo con el centenario de su construcción, no pasa por su mejor momento.

Vecinos del edificio Sevillana, construido a comienzos de los 80 a pocos metros de la chimenea se pusieron hace unos días en contacto con La Opinión para alertar de su mal estado, para que sea examinada y si fuera necesario, restaurada.

«Hay desprendimientos», explicó Pedro Calvo, presidente de la comunidad de propietarios de uno de los portales del bloque, que destacó que se producen, sobre todo, «en los filos de la chimenea, donde hay muchos trozos que faltan porque se han caído».

Este vecino resaltó que la chimenea de la antigua fábrica de electricidad de La Malagueta cuenta «con tramos en un estado de poca conservación», y puso como ejemplo las cuatro grandes esferas situadas en las esquinas de la base, junto al arranque del cuerpo principal de la chimenea, que presentan grietas muy importantes. «Están resquebrajadas totalmente», indicó, al tiempo que también mencionó el bordillo cuarteado que puede apreciarse alrededor de la parte superior de la base.

También hizo referencia a las plantas que han aparecido en el arranque del cuerpo principal.

Además, Pedro Calvo señaló el suelo de la urbanización, al pie de la chimenea, para recordar que hace años impactó un trozo de hierro que se desprendió de la parte superior de la chimenea que podía haber matado a quien que pasara por allí. «Mira el boquete», comentó. Como recordó, tras este desprendimiento la chimenea fue rodeada de andamios y se le retiró la parte superior. «La desmocharon», indicó.

Los vecinos mostraron a este diario su preocupación porque puedan desprenderse más trozos y causen un accidente que podría ser mortal. «La chimenea es un peligro», resumió Pedro Calvo.

Por último, recordó que durante la construcción del edificio Sevillana, una persona próxima a la obra comentó«que la chimenea se había movido y habían tenido que meterle un montón de escombros y de hormigón». Un comentario, señaló, que pone en alerta a los vecinos, con vistas a futuras obras en la vecina sede de Endesa en la calle Maestranza, parte de la antigua fábrica de electricidad, «si tocasen el edificio y bajaran el sótano una planta», indicó.

Una portavoz de la administración del edificio Sevillana informó a este diario de que, según el Registro de la Propiedad, la dueña y responsable del mantenimiento de la chimenea no es la comunidad de propietarios sino la constructora Vertecsa, una empresa que levantó en bloque y que «ha desaparecido».

La primera protección

Como recordó a este diario Francisco Rodríguez Marín, presidente de la Asociación en Defensa de las Chimeneas y el Patrimonio Industrial de Málaga, la de La Malagueta fue la primera chimenea de Málaga en ser protegida, en concreto en 1980, tras las gestiones del arqueólogo Rafael Puertas para evitar su demolición. «In extremis se conservó dejando un patio interior en el bloque y dando más edificabilidad».

En la actualidad, cuenta con la doble protección de la Junta y del Ayuntamiento, que la incluyó en el catálogo de edificios protegidos del PGOU. «Es una de las más antiguas y bonitas que tenemos, obra de Eduardo Strachan, el autor de los edificios de la calle Larios y del edificio del marqués de Benahavís» (demolido esta primavera en Hoyo de Esparteros).

Rodríguez Marín, que es profesor de Historia el Arte de la UMA, calculó que el último desprendimiento serio al que hacen referencia los vecinos tuvo lugar hacia 1998, la última vez que le colocaron andamios y la restauraron, aunque puso en duda que desmocharan la cabeza.

La delegada de Cultura de la Junta, Carmen Casero, declaró a La Opinión que comunicará la queja a los técnicos para que inspeccionen el estado del BIC.

La chimenea es el único vestigio de la fábrica de la compañía inglesa The Málaga Electricity Company Limited de 1896, puesto que el edificio original de Eduardo Strachan desapareció tras el incendio de 1958 y sólo sobrevive la ampliación anexa que en 1922 realizó en la misma calle Maestranza el ingeniero Juan Brotons.

Hace unos días, vecinos de La Malagueta reclamaban la inclusión de la fábrica de 1922, las actuales oficinas de Endesa, en el catálogo de edificios protegidos del PGOU, para hacer efectiva la moción respaldada en julio de 2017 por todos los grupos políticos municipales, ante el temor de que pueda ser demolida.