Los 170 niños del club de la Victoriana llevan más de un mes sin luz, ni agua caliente debido al estallido de una de las calderas que causó la detonación del cuadro de luces. La asociación deportiva que se encuentra sin fondos solicitó ayuda económica al Ayuntamiento para que la actividad de los niños no se viese irrumpida, pero no han obtenido una solución hasta el pasado lunes que han conseguido reparar la luz.

Tras la explosión, la directiva se puso en contacto con la Admintración malagueña para que les ayudaran debido a la falta de fondos en el club y estos le mandaron a 2 técnicos del área para evaluar la situación. El mismo día, realizaron un "bypass" de urgencia que permitió que al menos hubiese agua fría. Fuentes del club aseguran haber estado en continuo contacto con el consorcio, pero consideran que han sido "ninguneados". Actualmente están a la espera de que se apruebe el presupuesto diseñado por el área de deportes para poder retomar su actividad normal.

El Ayuntamiento, por su parte, defiende haber hecho todo lo que estaba en sus manos. Aseguran que el mismo día del accidente, dos técnicos del Área de Deportes se personaron en el lugar para evaluar la situación y remitieron por vía de urgencia el expediente a Intervención. Además, afirman que durante todo este tiempo, Intervención ha pedido más documentación, la cual se ha aportado y que están a la espera de su visto bueno para un pronto arreglo. Igualmente insisten en que el Área de deportes contactó con Servicios Operativos para reparar el cuadro eléctrico y devolver la luz, cosa que ocurrió este lunes, un mes después de que tuviese lugar dicha explosión.

El club denuncia la falta de soluciones, mientras no tenían luz tuvieron que recurrir a un generador de gasolina para poder poner las lavadoras y el internet. Han pasado 33 días hasta que le han arreglado la luz pero los problemas no se quedan ahí , los niños siguen sin poder bañarse con agua caliente después de realizar su actividad física. Esta asociación deportiva cumple una función social que ayuda a través del deporte a niños en riesgo de exclusión social y con parálisis cerebral y se han visto obligados a interrumpir su actividad durante un tiempo.

Fuentes cercanas al club aseguran que el problema viene de largo. Con la llegada de la nueva directiva hace tres años y a la vista de que la anterior no había hecho nada, estos solicitaron ayuda al Gobierno malagueño para solucionar un problema en las calderas. El 21 de mayo de 2016, el club contacto con el Ayuntamiento solicitándole ayuda para arreglarlas, pero tras varios intercambios de correos la respuesta fue que no había fondos suficientes en el presupuesto de la Administración. Ante dicha respuesta, la asociación decidió hacer unas mínimas reparaciones con el poco presupuesto con el que contaban para poder seguir adelante.