El Ayuntamiento, según explicó a este periódico el teniente de alcalde de Economía y Hacienda, Carlos Conde, en relación a lo prometido por el regidor, Francisco de la Torre, va a eliminar el Impuesto de Plusvalía en apenas ocho años, eso sí, sólo en concepto de herencia o ‘mortis causa’, no por transmisiones de viviendas entre vivos. ¿Cómo se hará? Pues durante los próximos ocho años se bonificará el pago en un 12,5% anual, de forma que al final del periodo nadie pagará por este concepto. Sin embargo, se trata de un tipo impositivo, este de plusvalía por herencia al fallecer un familiar o allegado, que deja mucho dinero en las arcas municipales, un líquido vital para hacer política, obras en los distritos y todo tipo de proyectos. Sólo en lo que va de año, las arcas municipales han ingresado por plusvalía ‘mortis causa’ 13,5 millones de euros, una cantidad sumada de las 11.607 declaraciones de malagueños. Estos son los datos recabados entre el 1 de enero y el 15 de noviembre de 2019.

En el mismo periodo de 2018, el Consistorio ingresó por plusvalía ‘mortis causa’ 14,9 millones de euros, 1,4 millones de euros más que en el mismo periodo de 2019, un descenso «moderado». Eso tiene una explicación: el Constitucional declaró que las transmisiones de los inmuebles a pérdida, es decir, si habían perdido valor entre el momento de la compra y el de la transmisión (por venta, donación o herencia), no debían declararse, sumiendo en una confusión a las administraciones locales. Esto vale para ‘mortis causa’ e ‘inter vivos’.

Pues bien, la cifra ingresada entre 2018 y 2019 cae porque el Ayuntamiento ya prometió que no liquidaría estos casos hasta que el Gobierno reformase el impuesto y cada vez más los que han heredado una casa por la muerte de un familiar han declarado ante la Hacienda municipal haber recibido la vivienda con una pérdida de valor, declaraciones admitidas a trámite por el Consistorio, explica Conde. De ahí los 1,4 millones de euros menos ingresados. «Aluden a que lo que había escriturado cuando la madre compró la casa era un valor equis y lo heredado ahora tiene menos valor. Dicen que ha habido una pérdida y a nosotros esa declaración no está valiendo. Ahora, lo que vamos a hacer es revisar todas esas declaraciones para que prueben la menor valoración del inmueble con un documento oficial. El cómputo total ha bajado porque cada vez más gente declara que está en situación de pérdida». Una vez se compruebe la menor valoración, no tendrán que liquidar el impuesto. En caso contrario, sí deberán hacerlo. Conde, no obstante, sostiene que «es bastante difícil que se pueda probar por un tercero que habiendo existido una herencia haya pérdida de valor».

Total ingresado

En cuanto al total ingresado por los diferentes conceptos, es decir, no sólo herencia, sino también por transmisiones de viviendas ‘inter vivos’ el Ayuntamiento malagueño ha recaudado, entre el 1 de enero y el 15 de noviembre, 44,69 millones de euros, lo que supone la presentación de 22.730 declaraciones. De las transmisiones ‘inter vivos’ el Consistorio ha recaudado en el periodo de referencia 31,15 millones de euros (11.123 declaraciones) y por ‘mortis causa’, 13, 5 millones de euros. A final de año, explica Conde, se espera ingresar por este impuesto en las arcas municipales un total superior a los 48,8 millones de euros, aunque insiste en que se trata sólo de una estimación. «Estaríamos pendientes de liquidar 4,18 millones de euros a 15 de noviembre», subraya. El año pasado, se ingresó un total de 47,5 millones de euros por todo el impuesto. El crecimiento se explica por la pujanza del sector inmobiliario.

El teniente de alcalde de Economía y Hacienda subraya que, para el supuesto de ‘mortis causa’, el Consistorio tiene un importante programa de bonificaciones, de forma que este año van a ser bonificadas con hasta el 95% del pago del impuesto 1.625 declaraciones presentadas por malagueños, lo que supone un ahorro para sus bolsillos superior a los 1,71 millones de euros.

«El Ayuntamiento, por contextualizar, si de algo puede presumir, es de tener un IBI, también en relación con las viviendas, de los más bajos de España. De las capitales andaluzas es la que menos cobra por este impuesto y, además, es de las más bajas de España».

Las grandes ciudades del país, añade, no han iniciado aún el camino de reducir y eliminar el Impuesto de Plusvalía, sobre todo en relación a ‘mortis causa’. Es un impuesto estatal y debe ser el Gobierno central, en funciones durante meses, el que lo reforme y diga cómo debe liquidarse. «Esperamos que el Gobierno ponga en marcha la reforma, que está nuevamente aparcada, tras dieciséis prórrogas. La plusvalía está muy atacada por los juzgados», recalca, lo que supone una seria duda para los ayuntamientos, sobre todo en relación al importe de las liquidaciones a devolver. En esa reforma, por cierto, habrá de abordarse cómo se compensa por la pérdida de estos ingresos a los consistorios.

Conde recuerda que «en ocho años, y en relación al Impuesto de Plusvalía ‘mortis causa’ para primeras viviendas no se liquidará el importe, porque estará bonificado para todos», dice, y explica que la idea es «reducir progresivamente un 12,5% anual el concepto ‘mortis causa’», de tal manera que en ocho años ya no habrá que pagarlo, pues se habrá llegado al 100% de bajada de este tipo impositivo.