La Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía extinguirá un contrato por valor de 36,8 millones de euros para la segunda fase del Vial Metropolitano Distribuidor Oeste de Málaga, que fue firmado hace 10 años con la UTE Conacon-Sando para la construcción de una carretera tipo autovía al sur de la hiperronda con 6,1 kilómetros de extensión. De este modo, se aparca hasta su posterior adaptación la ejecución de una infrestructura viaria que fue proyectada por el Gobierno andaluz del PSOE hace una década, con la intención de facilitar conexiones de entrada o salida en la hiperronda y facilitar los accesos a puntos como el Aeropuerto, los polígonos industriales o Guadalmar.

Así lo ha aprobado en su reunión de este martes el Consejo de Gobierno, que ha autorizado a la Agencia de Obra Pública de Andalucía para la resolución de dicho contrato y proceder a la actualización del proyecto, una vez que tanto tiempo después ya no es absolutamente compatible con la dimensión actual de la propia hiperronda y la adjudicación del acceso norte al Aeropuerto.

El Ejecutivo andaluz del PP y Ciudadanos ha anunciado esta medida esgrimiendo como uno de los argumentos más ilustrativos que los gobiernos socialistas de la comunidad estuvieron diez años sin asignarle una dotación presupuestaria a esta actuación. De hecho, las obras no han llegado a ser iniciadas en todo este tiempo a pesar de que habían sido adjudicadas.

Según recordaron fuentes del Gobierno andaluz, en la década en la que no se ha realizado ningún movimiento en relación a esta infraestructura sí se ha ejecutado, en cambio, la hiperronda o el Ministerio de Fomento adjudicó, a inicios de 2018, el acceso norte al aeropuerto de Málaga, que aún está pediente de ser acometido.

Así, desde la Junta explicaron que tanto las actuaciones ya ejecutadas en la hiperronda como los planteamientos del proyecto del acceso norte al aeropuerto "causan una afección importante al proyecto del vial distribuidor oeste". "Esto hace inviable el tramo entre la A-366 y la A-404 y deja como única solución la construcción de un cajón hincado por debajo de la autovía A-7, que dispone de ocho carriles en sendos sentidos, lo cual es muy costoso y funcionalmente inadecuado", expusieron al respecto.

Otro de los argumentos ofrecidos por el Gobierno autonómico de PP y Cs para llegar a este extremo es que retomaron sin éxito "las conversaciones con el Ministerio de Fomento para ejecutar ambas obras -el vial distribuidor oeste y el acceso norte al Aeropuerto- con el objetivo de optimizar recursos", e incluso al Gobierno central en funciones "se le han trasladado varias opciones para hacer posibles ambas obras, partiendo de que la necesidad de modificar el proyecto era del Ministerio de Fomento".

Asimismo, otra de las causas esgrimidas evidencian que, al no ejecutarse el proyecto adjudicado hace 10 años del vial metropolitano distribuidor oeste, se pierden los fondos europeos con los que iba a realizarse la obra. La imposibilidad actual de que los trabajos concluyesen en el marco del programa operativo Feder 2014-2020 también ha influido a la hora de adoptar la resolución del contrato.

Una vez que se ha procedido a la extinción del contrato, el Gobierno andaluz le ofrece a la UTE Conacon-Sando "una indemnización del dos por ciento del precio de adjudicación, que asciende a 635.378 euros", así como la devolución de los 1.474.078 euros que fueron entregados en concepto de garantías contractuales.

Ahora bien, la Junta de Andalucía matizó que la resolución de dicho contrato no implica renunciar a la construcción del vial distribuidor, pues se pretende llevarlo a cabo adaptando su ejecución "a las condiciones actuales de su entorno". Es más, en este sentido se recordó que "la actualización de este proyecto está recogida dentro de la memoria del presupuesto de la Administración autonómica para 2020".