Gracias al placer de la lectura, la Asociación Ecologista Ciriana ha rescatado y atendido este año a 13 podencos, que andaban perdidos y abandonados por el entorno de Churriana. Como recuerda la secretaria de Ciriana Maricruz Torres, «cuando acaba la temporada de caza la situación es tremenda».
A Luki, uno de ellos, lo habían colgado del rabo. Por la salvajada terminó perdiendo el rabo y además se le partió la cadera. A Luki hubo que operarlo. El animal ya descansa, recuperado, en una casa de acogida.
El dinero de la operación salió de una iniciativa que este año se estrena el próximo lunes 9 de diciembre. Se trata del mercadillo navideño de libros de segunda mano de Churriana, una idea que nació hace siete años de una bibliotecaria de la Biblioteca Municipal José Moreno Villa y que desde hace tres años organiza Ciriana en el salón de este mismo equipamiento (calle Maestro Vert, 21).
«Este año estamos supercontentos porque nos han donado más de 5.000 libros, la gente se ha volcado mucho. Nos han llegado de muchos distritos de Málaga pero también de Alhaurín de la Torre y Benalmádena», explica Maricruz Torres, que señala que ha recibido donaciones «con libros maravillosos», como los del profesor de la Universidad de Málaga Carlos Gozalbes Cravioto. También está el caso de dos bares de Churriana que han aportado libros, «porque a sus propietarios les gusta mucho leer». La Opinión es otra de las entidades que colabora año tras año con el mercadillo.
Como indica, a lo largo del año los libros van llegando y los conserva en su propia casa la presidenta de Ciriana, Encarna García.
La asociación ecologista, que no cobra cuota a sus miembros por trabajar en un barrio como Churriana en el que abunda el desempleo, tiene en este mercadillo de libros su principal fuente de financiación. Hay libros a uno, dos y tres euros. «El primer año vendimos un diez por ciento de los dos mil libros que reunimos, el año pasado el veinte por ciento de 3.000 y este año, con más de 5.000, esperamos llegar a al 30 por ciento», confía.
Fomento de la lectura
Además de poder operar animales, los libros les permiten a Ciriana esterilizar perros y gatos abandonados y darles una segunda oportunidad.
Pero junto a este propósito, el mercadillo también lleva muy a gala el objetivo de fomentar la lectura. «La gente cada vez lee menos, cuando un libro lo puedes llevar a cualquier parte sin necesidad de cargador», argumenta Maricruz. Otro objetivo es lograr que los churrianeros acudan más a la biblioteca municipal, algo que, parece, ya están consiguiendo: «Desde que cogimos nosotros el mercadillo de libros de segunda mano se han duplicado las visitas a la biblioteca», cuenta.
Y en el mar de libros hay novela, historia, enciclopedias, libros infantiles, de cocina... Hasta el 9 de enero, de lunes a sábado de 10 a 21 horas.
