La Comisión de Ordenación del Territorio y Seguridad dio ayer luz verde al plan de actuación local ante el riesgo sísmico de Málaga para 2019, así como a su posterior remisión a la comisión de Protección Civil de la Junta de Andalucía. Según explicó el responsable de Protección Civil en la ciudad, Juan Antonio Benítez, se han analizado los 52.000 edificios de Málaga usando las bases de datos del Catastro para conocer, por ejemplo, su estado de conservación, el tiempo que llevan construidos y otros parámetros importante para prevenir el impacto de los terremotos en estas construcciones.

El edil de Seguridad, Avelino Barrionuevo, declaró que Málaga es la segunda provincia del país con mayor riesgo de sufrir un terremoto, aunque hace siglos que no se produce uno. Según el documento, «la peligrosidad sísmica del término municipal de Málaga, según el IGN Instituto Geográfico Nacional reflejada en el mapa de peligrosidad sísmica de 2015 para un periodo de retorno de 475 años, es la segunda más alta de España». Así, el Servicio de Protección Civil ha redactado este plan, en el que se ha trabajado más de cinco años, para establecer el marco orgánico-funcional y los mecanismos que permitan la movilización de recursos humanos y materiales necesarios para la protección de personas y bienes en caso de grave riesgo, catástrofe o calamidad pública y se articula la coordinación entre las diferentes administraciones para responder en estos supuestos.