Los «hechos aislados»«hechos aislados», como calificó la pasada semana el Gobierno los numerosos ajustes de cuentas vinculados al crimen organizado que se están produciendo en la Costa del Sol en las últimas semanas, suman un nuevo caso. Tras los cuatros ejecutados a tiros y un herido grave que se han contabilizado en Marbella y Mijas desde finales de octubre, ayer le tocó de nuevo a este último municipio. El cuerpo de un varón fue hallado en una zona de rocas poco accesible conocida como el Peñón del Cura, junto a la A-7 que bordea la costa en el límite entre Mijas y Fuengirola. Precisamente, en ese punto de la vía hay una salida y un aparcamiento para acceder a la playa bajando por unas escaleras.

Un particular que paseaba por la zona comunicó su macabro hallazgo a Emergencias 112 sobre las 9.15 horas de la mañana, por lo que el servicio coordinador movilizó a efectivos de la Policía Local de Mijas, Bomberos, sanitarios y Guardia Civil, cuyos agentes asumieron la investigación nada más llegar a la escena del crimen. El cuerpo era de un joven de gran envergadura bocabajo y junto al mismo había numerosos casquillos. Pese a que se encontraba en un punto poco accesible, los sanitarios de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias consiguieron bajar y confirmar lo que era evidente mientras los agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil llegaban hasta ese punto en una de sus embarcaciones para que los investigadores pudieran inspeccionar la zona y hallar nuevos indicios que permitan la resolución de un caso que comenzará con la identificación del cadáver. Después de que el juez ordenara el levantamiento del mismo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para que los forenses le practicaran la autopsia.

Según fuentes cercanas al caso, el fallecido, identificado como un joven de 20 años originario de Europa del Este, presentaba a simple vista no menos de cinco impactos de bala y podría haber fallecido en torno a la medianoche anterior o algunas horas posteriores. Las primeras gestiones realizadas por los agentes no revelaron que tuviera antecedentes en España, aunque la Guardia Civil sigue explorando esta vía. Las fuentes añadieron que la presencia de restos de munición junto al cadáver invita a pensar en una encerrona o en que la víctima fue llevada bajo amenaza hasta la zona baja de la playa para ser ejecutada sin que los conductores que circulaban por la autovía vieran nada sospechoso.

Concentración de crímenes

En todo caso, un nuevo ajuste de cuentas. El segundo que se produce en Mijas en apenas 20 días, ya que un británico de 39 años murió el pasado 21 de noviembre tras ser acribillado a tiros cuando llegaba a su vivienda de la urbanización Riviera del Sol. Entre uno y otro, el 3 de diciembre, un francés de 60 años fue asesinado en Cabopino (Marbella) por al menos dos hombres que huyeron en un vehículo alquilado que poco después fue hallado ardiendo en Mijas. Entre un punto y otro, los ocupantes del coche arrollaron una de las barreras del peaje de la AP-7.

También en Marbella, el 21 de noviembre, un varón de origen árabe murió de un disparo en la avenida Andasol, en la urbanización Alvarito Playa, en un incidente en el que otra persona resultó gravemente herida. El 28 de octubre, por su parte, el cuerpo sin vida de un hombre de nacionalidad búlgara fue hallado en la cuneta de la carretera A-7176 hallado en la cuneta de la carretera A-7176 que une los municipios de Marbella e Istán. En ninguno de los casos mencionados constan detenidos. Estos ajustes de cuentas, los cometidos anteriormente y las muertes violentas registradas en diferentes puntos de la provincia por otros motivos en menos de dos meses, han convertido el año 2019 en el más violento para Málaga más violento para Málaga desde que el Ministerio del Interior ofrece estadísticas provinciales (2011), ya que antes de que finalice el año suma al menos 24 asesinatos/homicidios.