Que Málaga es un foco de atracción de población es un hecho ya innegable y que vienen a refrendar una y otra vez las estadísticas. Pese a que la caída de la natalidad ha hecho descender su crecimiento vegetativo, la provincia sigue sumando nuevos habitantes cada año y el año pasado fue la tercera de España que ganó más empadronados, sólo superada por Madrid y Barcelona. Así lo ponen de manifesto las cifras del padrón municipal a 1 de enero de 2019 publicadas ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Así, de un año a otro la provincia ha crecido en 20.664 habitantes, situando la cifra total de empadronados en 1.661.785, la más alta alcanzada por Málaga en su historia y manteniendo la tónica al alza de las últimas décadas. Además el crecimiento que en los últimos años se había ralentizado vuelve a coger fuerza.

En los últimos diez años, la provincia, además, ha ganado casi 70.000 habitantes. Y se ha convertido en el motor poblacional de Andalucía, que también logró crecer el últim año en población, con Málaga aportando prácticamente dos tercios de ese incremento de residentes. En la comunidad, fueron Córdoba y Jaén las únicas provincias que perdieron vecinos en el ejercicio analizado.

Málaga logra superar en el crecimiento en número de habitantes a otras provincias tan fuertes como Alicante o Valencia y supera en esa subida en términos generales a comunidades autónomas como Baleares o Murcia.

Por municpios, 45 de los 103 que componen la provincia perdieron población en ese año, especialmente en las zonas del interior frente a una Costa del Sol que no deja de ganar residentes.

Andalucía ha ganado casi 30.000 habitantes, concretamente, 29.832, según la comparativa del padrón municipal de 1 de enero de 2019 y de 1 de enero de 2018, y se ha situado en 8.414.240 habitantes, según los datos recogidos por Europa Press.

A nivel nacional, según el padrón de 1 de enero de 2019, el número de habitantes en España ascendía a 47.026.208 habitantes, un 0,6 por ciento más que el ejercicio anterior, de los cuales 23.042.428 eran hombres 983.780 eran mujeres.

En el desglose por comunidades autónomas, Castilla y León ha sido la comunidad más afectada por la pérdida de población con un descenso de 9.616 habitantes, seguida de Asturias con 5.444, Extremadura con una caída de 5.153 y Galicia de 2.244. Porcentualmente, la mayor caída poblacional corresponde al Principado con un -0,53%, seguido de Extremadura (-048%); Castilla y León (-0,40%) y Galicia (-0,08%).

La Comunidad de Madrid fue la que registró un mayor incremento de la población al con 85.315 habitantes más (+1,30%) que eleva la cifra total a 6.663.394; seguida de Cataluña con 75.152 habitantes más y la Comunidad Valenciana con un aumento de 40.066.