­La concejala de Comercio y Vía Pública del Ayuntamiento de Málaga, Elisa Pérez de Siles, tiene claro que «el futuro es la unificación de la imagen» de las terrazas hosteleras así como de los toldos y el mobiliario que ocupa la calle en el Centro. De hecho, el Ayuntamiento ya ha dado los primeros pasos para trabajar con los representantes de MAHOS, que agrupa al sector, en este sentido: así, el área ha remitido un documento a los negocios en los que da una serie de recomendaciones sobre la instalación de separadores en las terrazas autorizadas en el Centro Histórico.

Estas recomendaciones son de una serie de modelos con características similares, por lo que ello marca claramente el camino que quiere seguir Vía Pública. Pérez de Siles explicó a este periódico que desde principios de diciembre se está trabajando con los hosteleros sobre cómo se van a sustituir las toldetas laterales. «Deben ser sustituidas desde la aplicación de la nueva Ordenanza de Vía Pública; hubo un tiempo de transición que acabó a finales de julio para sustituir esas toldetas laterales con algún elemento contemplado en el texto de la ordenanza; se agotó el plazo y comenzamos a desarrollar las labores de vigilancia con inspectores de Vía Pública para que se cumpliese con la obligación de quitar las toldetas», dice la edil, que al tiempo recuerda que, al llegar el invierno, era importante encontrar una solución para las terrazas y evitar que los clientes se sintieran molestos con el viento y el frío. Por ello, se les ha remitido un escrito a los hosteleros con distintos separadores, «recomendamos algunos modelos, pero eso sí: sugerimos, no obligamos. Ya estamos trabajando en los planes de aprovechamiento y el futuro es la unificación de la imagen».

En cuanto al mobiliario aconsejado, casi al 100% se contemplará, según la portavoz del PP, en los planes de aprovechamiento.

En el documento, se pide a los hosteleros que tengan en cuenta los siguientes criterios: el material ha de ser transparente, no opaco, de metacrilato, preferiblemente, o cualquier material asimilado. Se pide que el color de la periferia y jardineras sea el negro o el marrón oscuro; las dimensiones máximas son de 1,50 metros. Y se dan más especificaciones: los separadores han de llevar incorporado sistemas antivuelco, con o sin jardineras; las patas de apoyo del delimitador no deben suponer un obstáculo que pueda provocar caídas de los viandantes, es decir, no deben sobresalir del mismo; se recomienda que la terminación del separador sea en línea recta; no pueden llevar publicidad de marcas o similares; asimismo, han de tener ruedas o ser fácilmente trasladables, para que no hagan ruido tras su desinstalación.

Más recomendaciones

Por otro lado, la superficie de ocupación de los separadores no podrá superar, en ningún caso, la superficie autorizada con mesas y sillas. Se colocarán siempre dentro de la zona de ocupación autorizada. Además, una vez terminada la actividad se deberá recoger toda la instalación, y «bajo ningún concepto podrán quedar depositadas en la vía pública».

Por último, «se deberá presentar una solicitud junto con una memoria descriptiva y un reportaje gráfico del modelo que se pretenda instalar para dejar constancia en cada expediente», según el documento al que tuvo acceso este periódico, y que adelanta los trabajos sobre unificación visual de terrazas.