Lola Santero, que vive en el segundo piso, tiene vistas de primera sobre el solar privado que tiene justo enfrente, por eso detalla a La Opinión: «Veo muy bien las ratas y también toda la basura que echa la gente, que no miran por las criaturas que vivimos aquí».
Lola forma parte de una de las 17 familias de una promoción municipal de viviendas en el número 6 de la calle San Félix Cantalicio y como el resto de vecinos, la última vez que vio el solar completamente limpio, de un extremo a otro, fue cuando el alcalde inauguró su bloque, en marzo de 2015.
Eso es al menos lo que desde hace cuatro años denuncian Ana Rodríguez y Jaime Igorra, que viven en la planta baja de la promoción municipal. «Dicen que el solar es de tres o cuatro dueños y que no se ponen de acuerdo. Aquí sólo hemos visto en 2018 que uno de ellos limpiara su parte», comenta Ana.
A su lado, Jaime Igorra precisa que «tras limpiarlo, señaló su parte con un taco de cal para dejar clara cuál era su parcela». De cualquier forma, Jaime Igorra critica que pese a la poda de la maleza, «dejan toda la porquería dentro del solar, así que todo se seca y sirve de abono».
El terreno se encuentra desde el año 2016 en el Registro Municipal de Solares y Edificaciones Ruinosas y aunque forma un único solar, para Urbanismo cuenta como dos parcelas, los antiguos números 5-7 y 9-11 de esta estrecha calle de Capuchinos.
«Yo estoy fatal de los huesos y la humedad de solar nos llega a la casa. Si te quedas un rato aquí sientes los pies fríos», destaca Ana Rodríguez, que comenta que «las ratas andan por el filo de la parcela como Pedro por su casa».
Por su parte Jaime Igorra comenta que el solar da a la espalda del Colegio Divina Pastora y que la puerta de emergencia del centro, que está al lado de la parcela, suele ser un punto de reunión de personas, «que se toman allí el bocadillo, la cerveza y cuando terminan, o dejan la porquería ahí o la tiran al solar». Como resultado, explica, además de ratas también hay gatos. «Y además escuchamos a las gatas cuando dan a luz».
Los vecinos vuelven a pedir al Ayuntamiento que ponga a raya la vegetación y la 'fauna' de este solar.
Respuesta de Urbanismo
El concejal de Urbanismo, Raúl López, respondió a los vecinos que las dos parcelas en las que está dividido el solar fueron limpiadas por sus propietarios el año pasado, a requerimiento del Ayuntamiento.
En concreto, la de los números 5-7, Urbanismo pidió que se limpiara en mayo de 2019 y en junio constató la limpieza. Y en cuanto a la parcela de los números 9-11, la petición de limpieza se produjo en febrero y el informe de constatación de la limpieza, en abril de 2019, por lo que en ambos casos se archivó el expediente, «porque el estado d conservación era aceptable».
«No obstante, vamos a dar a una nueva orden de limpieza a los propietarios», anunció. El concejal también pidió «responsabilidad y educación» para evitar que la parcela siga acumulando basura lanzada por incívicos.
