La economía malagueña seguirá moderando su crecimiento en este 2020 dentro del contexto actual de ralentización que se percibe a nivel internacional y nacional, según las previsiones publicadas este lunes por Analistas Económicos de Andalucía, el gabinete de estudios del Grupo Unicaja. El PIB de la provincia subirá este ejercicio un 1,9%, por encima del 1,7% previsto de media regional, aunque en esta ocasión, al menos de entrada, Málaga no encabeza las expectativas de crecimiento en la región, ya que para Cádiz el aumento previsto es del 2% mientras que Sevilla iguala a Málaga con otro 1,9%. En el caso de Andalucía, las previsiones para este año se han recortado en dos décimas en relación a las primeras que se publicaron hace un par de meses. Esta revisión a la baja se enmarca dentro de las que también han aplicado diversos organismos nacionales e internacionales a nivel general.

Cabe recordar que entre 2014 y 2017, años de intensa reactivación tras la etapa más dura de la crisis, la economía de Málaga creció por encima del 3% mientas que en 2018 ya se bajó al 2,8% y en el recién concluido 2019 se firmó un 2,4% (también por encima del 2,1% de Andalucía).

Para 2020, se prevé en Andalucía el citado aumento del 1,7% del PIB, con crecimientos en todos los sectores y tasas comprendidas entre el 0,7% del sector agrario y el 2,7% de la construcción. Por el lado de la demanda, se prevé un aumento del consumo, tanto de los hogares (1,3%) como del sector público (2,7%), en tanto la inversión aumentaría un 2,3%. En lo que respecta al mercado de trabajo se estima un incremento del 1,9% en ocupados, mientas que la tasa de paro se situaría en el 19,8%, 1,3 puntos por debajo de la estimada para 2019.

La coordinadora de estudios de Analistas Económicos de Andalucía, Felisa Becerra, ha explicado que el momento económico actual en el contexto exterior resulta "bastante incierto" mientras que la demanda interna a nivel nacional, pese a seguir creciendo de forma significativa, también ha moderado su evolución. En el plano internacional, se ha referido a cuestiones como el Brexit, que se materializará a finales de este mes de enero, o a las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China. En ambos casos, Becerra ha apuntado que los riesgos para la economía de ambas cuestiones parecen haberse "moderado" en los últimos meses, pese a la incertidumbre que puedan seguir generando de cara al futuro.

En este "convulso" contexto, Málaga todavía presenta, no obstante, un "sólido ritmo" de crecimiento del empleo, con una de las economías "más dinámicas" del conjunto andaluz. Becerra ha restado importancia al hecho de que la provincia no encabece, como es habitual, las previsiones de crecimiento en Andalucía, recordando que, de entrada, es una de las plazas con mejores números de empleo y cifras más bajas de paro. También ha recordado que los últimos datos macroeconómicos reflejan que crecimientos anuales del PIB por debajo del 2% son ya suficientes para crear puestos de trabajo.

"Obviamente, estamos en una senda de crecimiento más moderada que en años anteriores. Las perspectivas de la economía mundial parece que empiezan a mostrar síntomas de estabilización aunque aún es pronto para hablar de un punto de inflexión", ha apuntado Becerra, acompañada del director de Actividades Socioculturales de la Fundación Unicaja, Rafael Muñoz; el consejero delegado de Analistas Económicos de Andalucía, Rafael López del Paso; y la directora de Comunicación, Publicidad y Relaciones Externas de la Fundación Unicaja, Cristina Rico.

De esta forma, este observatorio sigue descartando hablar, de momento, de un frenazo económico e insiste en que las señales que se perciben son más de "desaceleración y moderación del crecimiento" y, de cara a este 2020, de "estabilización incipiente" de la actividad. Analistas Económicos también considera "prematuro" comentar la posible afección en el empleo de medidas como la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

Para el conjunto de 2019, Analistas Económicos estima que la economía andaluza ha crecido un 2,1%. El consumo privado ha aumentado un 2,1%, el gasto de las administraciones públicas un 2,1% y la inversión un 2,5%. Por el lado de la oferta, los sectores no agrarios habrían crecido a tasas de entre el 2% de la industria y el 5,1% de la construcción. En el mercado de trabajo, la cifra de ocupados subió un 2,9%, con tasas más elevadas en construcción (7,5%) e industria (5,6%). Por su parte, el número de parados cae un 7,7%,con una tasa promedio del 21,1%, casi dos puntos inferior a la de 2018, cuando la cifra de desempleados alcanzó las 904.600 personas.